La Franja de Gaza hizo caer a Ehud Barak. Es una de las primeras repercusiones negativas sobre la entidad sionista, tras la victoria de la Resistencia en la última guerra.

Gaza hizo caer a Barak. Es un inequívoco resultado de la fracasada agresión, y no requiere mucho análisis. No tenía otra alternativa, el ministro de Guerra, que renunciar, el resultado de la reciente operación militar contra la Franja de Gaza, le hizo desesperar de la posibilidad de éxito en las próximas elecciones, más siendo (la agresión) la grúa con la cual contaba en las elecciones, quería aplastar la Resistencia en Gaza. Este fue el trasfondo de su hostil decisión tomada junto con el primer ministro de su gobierno, Benjamín Netanyahu, pero las cuentas no salieron como deseaban.

No tenía otra alternativa que retirarse

Ehud Barak no podía, tampoco, competir en las próximas elecciones del “Knesset”, ya que está seguro de que su partido, el Partido de la Independencia, es incapaz de superar el umbral establecido en la Ley de las elecciones del “Knesset”, lo que significaría otro fracaso que se sumaría al anterior, por lo tanto, no tenía más remedio que anunciar su retirada de la vida política, a pesar de sus alegaciones de que, según dijo, quería dedicarse a los “asuntos familiares”.


Se suponía que la última guerra de "Israel" contra la Franja de Gaza iba a producir muchos beneficios, sin pérdidas significantes, de otras palabras, guerra "Deluxe", que permitiría al primer ministro del gobierno enemigo, Benjamín Netanyahu, y Barak también, superar las críticas formuladas en su contra, después de subir al “árbol iraní” tan alto, y bajar sin resultados, en el contexto de sus repetidas amenazas de atacar las instalaciones nucleares de Irán, y luego echarse atrás.

La imagen rota

Antes de la última agresión a la Franja de Gaza, la imagen del “oficial de seguridad” y la capacidad israelí para imponer lo que quiere Tel Aviv por la fuerza, estaba entredicho, era necesario para el dúo Netanyahu-Barak, la realización de una acción de seguridad que vuelva a restaurar la imagen rota, sino las elecciones próximas serán un verdadero desastre para ellos.

Entre todos los frentes que podrían haber sido teóricamente enfocados para una operación militar, la Franja de Gaza ha sido la elegida, como un mal menor. La Fuerza Aérea israelí inició la destrucción de objetivos en la Franja, sobre la base de “Banco de objetivos” elaborado por la inteligencia militar israelí, este mismo “Banco de objetivos” y la confianza absoluta en él y en la capacidad de inteligencia, animó al dúo, Netanyahu-Barak, a librar la guerra contra la Franja de Gaza.

La tentación del banco de objetivos

En el primer día de la agresión contra Gaza, se suponía, como creía el dúo, que sería el último día. El asesinato del comandante del ala militar de Hamás, Ahmed Jaabari, y al mismo tiempo, el supuesto ataque a la capacidad de misiles de las facciones palestinas, de acuerdo al “Banco de objetivos” considerado por la Inteligencia Militar “integro y completo”, motivó a todos a "levantar los guantes", e ir a la batalla militar.

La operación que Barak quería que fuese una palanca que le sirviera para salir de su crisis interna, y le devolviera los votantes que se alejaban de él y de su partido, no se ha materializado como esperaba y los resultados fueron contrarios a las suposiciones de la inteligencia que estaban seguros de que las facciones de la Resistencia palestina no tenían capacidad de responder con misiles, estas suposiciones estaban sobre la mesa de la reunión encabezada por Netanyahu-Barak cuando se tomó la decisión de atacar, por lo tanto las facciones palestinas se verían obligados a aceptar las condiciones israelíes, por lo que no fue controvertido que el resultado obtenido sería: rendición total de la Franja de Gaza.


La tentación del “Banco de objetivos” conllevaba varios resultados. Netanyahu y Barak predijeron que asestar el golpe y terminarlo en el mismo día, después de que las facciones fueran incapaces de responder, no provocaría ninguna reacción regional o internacional, por lo que el proceso fue muy atractivo... Pero el cálculo en el campo era diferente.

Temor ante una batalla terrestre

El estacionamiento de las unidades de los soldados de reserva en la frontera norte de la Franja de Gaza, acumulando hasta 56 mil soldados (de un total de 75 mil) que fueron llamados más bien por motivos de propaganda e intimidación, y luego la decisión de abstenerse a la invasión prometida por tierra, fue suficiente para tambalear la imagen "israelí" y mostrar a Tel Aviv y al promotor de la decisión, en imagen del temeroso de iniciar la lucha en el campo de batalla.

Esta misma imagen se impactó en el público israelí, siendo uno de sus secuencias, que la palanca que Barak quiso para sacarle de la crisis interna, no le sirvió para nada, al contrario, mantuvo a los votantes alejados de él y de su partido, los resultados fueron negativos. Las encuestas anteriores a la agresión contra Gaza confirmaban que Barack fracasaría inevitablemente en las elecciones, mientras que las encuestas realizadas después de la agresión confirman el mismo resultado.

Inevitable caída

Precedió todo esto, muchos intentos políticos, llevados a cabo por Barak y sus aliados, para evitar la caída inevitable, pero todos fracasaron.

Por su parte, el primer ministro del gobierno enemigo, Benjamín Netanyahu, intentó reservar un asiento para Barack desde fuera de las elecciones primarias del partido Likud, pero fue repelido y con fuerza, por diferentes corrientes en el Likud, lo que impidió obtener un asiento para él en la próxima Knesset, perdiendo así la grúa de su continuación en el sistema político.

Tampoco han tenido éxito los intentos de “incorporar” Barak al partido de la ex ministro de Exteriores, tzivi Livni, que se formará pronto, ya que debido al fracaso de la agresión contra Gaza, Barak no aportará nada significativo al nuevo partido en las urnas, y por consiguiente sería una carga no activa para el partido.

La maldición de Gaza

Es la maldición de Gaza... Los cálculos de campo fueron diferentes, y se cayó Barak.

A todo esto, hay que señalar que el anuncio de Barak de abandonar la vida política, es una evidencia indirecta, y un reconocimiento indirecto del fracaso de la agresión, y la victoria de la resistencia... Nadie puede creer que Barak se retiraría si hubiera triunfado en Gaza… Evidentemente es una salida obligada tras una caída muy dolorosa.

Alintiqad – Traducido del árabe