Una serie de protestas se registra en Grecia con la participación de empleados municipales, maestros, médicos, pacientes y personal de las fuerzas armadas, quienes tomaron las calles en el centro de Atenas para expresar su rechazo al nuevo paquete de medidas de austeridad.

Personas enfermas de cáncer y de otras enfermedades crónicas promovieron una movilización y se reunieron frente al edificio del Parlamento y al cercano Ministerio de Finanzas.
"Nos condenan a la muerte, sin médicos ni medicinas", decían las pancartas que portaban.


Después de dos años de severas condiciones de austeridad que han reducido los salarios, las pensiones y los beneficios del seguro social, sumado a la recesión y al desempleo en la endeudada Grecia, los manifestantes gritaron que ya no pueden pagar sus tratamientos.

Los farmacéuticos han dejado de proporcionar medicinas a crédito a los pacientes asegurados por la Organización Nacional Médica (EOPYY), debido a la deuda millonaria del Estado.

Los médicos que trabajan en hospitales públicos y que se mantienen en una huelga de 24 horas se sumaron a los pacientes para protestar por la escasez de personal y de medicinas a causa de los recortes en el presupuesto público.

Otra protesta fue realizada por empleados de la administración local, quienes mantienen una huelga de 48 horas en contra de los recortes al presupuesto, mientras miembros de las fuerzas armadas organizaron una protesta similar cerca del edificio del Parlamento.

Dos días después del inicio del nuevo año escolar, los maestros de escuelas primarias y secundarias públicas que mantiene una huelga de 24 horas marcharon en protesta por los nuevos recortes a los salarios, junto con otros servidores públicos que realizan paros laborales.


El sindicato de servidores públicos ADEDY informó que planea una huelga general en las próximas semanas en coordinación con el sindicato de trabajadores del sector privado GSEE, debido a que el gobierno aprobará en el Parlamento el nuevo paquete de medidas de austeridad que se discute.

Esta noche, el primer ministro griego Antonis Samaras se reunirá con sus dos socios de coalición para finalizar el paquete de ajuste por 11.500 millones de euros (14.600 millones de dólares USA) solicitado por los acreedores de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional a cambio de que Grecia pueda recibir más ayuda.