Las sanciones a Irán no funcionaron con Trump, ni funcionarán con Biden

El editorial publicado el sábado en el portal estadounidense The Hill avisa que sin un regreso rápido al acuerdo nuclear de 2015 con Irán, la actual Administración norteamericana, presidida por Joe Biden, “enfrenta el riesgo de una crisis nuclear que podría escalar rápidamente a una guerra devastadora. No hay tercer camino”.

El texto apoya las conversaciones en curso en Viena (Austria) entre Irán y las potencias mundiales, destinadas a reavivar el acuerdo nuclear de 2015, debilitado tras la salida unilateral de Estados Unidos, bajo el mandato de Donald Trump en mayo de 2018.

El artículo considera los diálogos —en los que Washington participa de manera indirecta— “como un momento decisivo para la diplomacia entre Estados Unidos e Irán, con importantes implicaciones a largo plazo para el futuro de Asia Occidental”.

Critica a un reducido número de los congresistas demócratas que piden a Biden que añade otros temas no nucleares, incluido el programa de misiles balísticos de Irán, entre otros, al actual acuerdo, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA).

Sin embargo, el texto advierte que este enfoque de “todo o nada” podría “dar lugar a ningún acuerdo, lo que deja una amenaza de guerra inaceptable e inminente”.

Conforme a Bryan Bowman, autor del artículo, la única forma de lograr un pacto más fuerte es “actuar rápidamente para reactivar el acuerdo nuclear, restablecer un grado de confianza entre Washington y Teherán”.

El escrito cuenta cómo la salida unilateral de EEUU del PIAC, justo cuando el pacto estaba funcionando, destruyó este gran logro de la diplomacia. Destaca, además, que Teherán siguió cumpliendo plenamente sus obligaciones, incluso un año después de la salida de Washington. Pero, en respuesta a la reimposición de las sanciones estadounidenses, Irán ha tomado gradualmente pasos fuera de los términos del PIAC.

Los pasos correctivos de Irán, según Bowman, son solo “una de las muchas consecuencias del desastroso enfoque de “máxima presión” de Trump, que ha llevado a los dos países terriblemente al borde de una guerra total y ha causado un sufrimiento innecesario a los civiles iraníes, particularmente en medio de la pandemia de COVID-19”.

El artículo señala que, a pesar de que las sanciones han cobrado un gran precio a los civiles iraníes, la República Islámica está comprometida a resistir la presión estadounidense, lo que deja en claro que los embargos nunca funcionarán con la nación persa.

Hasta la fecha, Irán y los signatarios del PIAC han celebrado seis rondas de negociaciones en Viena y en todas las pláticas el equipo negociador iraní ha dejado en claro que Teherán no hará concesiones más allá del marco del pacto nuclear.

Irán dice que les toca a otros miembros del pacto la toma de decisiones difíciles, pues, por su parte ya lo hizo al mantener vivo el acuerdo tras la salida de EEUU, pese a los incumplimientos del resto.

Es más, Teherán asegura que volverá a revertir las medidas correctivas, una vez que Washington elimine los embargos contra la nación iraní.