Fuerzas oscuras intentan balcanizar el Líbano

Por Felix Antonio Cossío Romero

El sionismo y occidente en estos momentos ven una gran fragilidad en el Líbano. Institucional, económica y de seguridad, todo esto se complicó más  con el “accidente” sucedido en el puerto de Beirut (que dejó 220 muertos, más de 6000 heridos, miles de desplazados y parte de la ciudad destruida), las potencias occidentales con Francia a la cabeza ve una inmensa posibilidad de balcanizar el Líbano en regiones étnicos-religiosas. La crisis económica, la falta de gasolina y alimentos, los constantes cortes de energía, se prestó para la oscura injerencia de fuerzas externas, que quieren ver fracturado a este pequeño país en provincias.

Los servicios de inteligencia M16, La CIA y La Mossad ven la perfecta oportunidad de llevar al país a un punto de no retorno, y lo que no lograron con Daesh en Siria e Iraq de balcanizar estos países en micro-estados, quieren aprovechar esta crisis del país de los cedros para romper la nación y su orden confesional. Para EE UU y la entidad israelí la cartografía de Medio Oriente no ha acabado de trazarse de manera definitiva.

Por eso el ministro de exteriores de Francia Jean-Yves Le Drian “advierte” del posible colapso del país y su posible desaparición. Francia como hace en África no renuncia a sus antiguas colonias e interfiere en sus asuntos internos de manera constante y descarada.  Por eso las constantes visitas del presidente de Francia Emmanuel Macron al país.

El sionismo sueña con una guerra civil en el Líbano como la de los años 80, que desangre el país y lo fragmente tratando de disolver al movimiento político-militar Hezbolá, “asegurando” la frontera norte de la entidad sionista (Palestina ocupada). Después de fracasar en Iraq y Siria. Líbano, y el movimiento Hezbolá se convirtió en una de las prioridades del sionismo.

El Líbano, es un país muy pequeño, pero en él conviven una gran diversidad de musulmanes chiíes y suníes, cristianos maronitas, drusos y una pequeña comunidad judía. Ver al Líbano balcanizado en pequeñas entidades territoriales enfrentadas entre sí, es el sueño de Tel Aviv, así se podrían anexar de manera definitiva las granjas de Shebaa (territorio libanés ocupado) a su estado colonial, y además, desaparecer a Hezbolá (que si no hubieran sido por ellos hace tiempo el régimen israelí se fuera fagocitado al Líbano en su totalidad), y así preparar todo para atacar a La República Islámica de Irán de manera directa (incluso con armas atómicas).

El presidente de Francia Emmanuel Macron se presenta a la opinión pública como salvador, pero sus objetivos siguen siendo neo-coloniales. Quieren crear un nuevo gobierno que se someta a la voluntad de París, que saque a Hezbolá del gobierno y lo desarme y firme la paz con la entidad sionista a cambio de un “rescate económico”, el país perdería toda su independencia.

El Líbano debe mantenerse como un Estado-Nación fuerte, con instituciones solidadas y lograr un acuerdo de unidad nacional que logre la participación de todos los actores del país. Porque tal como lo advirtió el presidente Michael Aoun, existen “varias repúblicas” en la nación que podrían volverse independientes y balcanizar el país. Lograr un nuevo contrato social como lo señala el líder de Hezbolá Hasan Nasrolá dará la posibilidad de resolver muchos males del país como la corrupción, la pobreza y el desempleo. Y así vencer la injerencia extranjera.