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Internacional

Bolsonaro admite que no es bienvenido en ninguna parte, sobre todo en Chile

Bolsonaro admite que no es bienvenido en ninguna parte, sobre todo en Chile

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, admitió su baja popularidad a nivel internacional al declarar a la prensa en Santiago de Chile que “tengo manifestaciones en contra en cualquier parte del mundo a donde voy”.

El mandatario se refirió así a las manifestaciones y actos que están programados para todo este fin de semana en Chile en rechazo a su visita para participar en la reunión de presidentes sudamericanos.

A su llegada a Santiago, Bolsonaro fue muy locuaz con declaraciones en el aeropuerto y a su llegada al hotel donde se aloja, pero de entrada acuño que “yo no vine aquí a hablar de Pinochet” aunque a seguidas casi dio un traspiés al declarar que “hay muchos a los que les gusta y que no les gusta”...

La aclaración del presidente brasileño no es para menos, pues si algo causó resquemor en amplios sectores de la sociedad chilena fue su “crítica” hace poco tiempo a la dictadura de Augusto Pinochet de que si en algo falló fue en no haber matado a más chilenos.

Pero si esas declaraciones fueron hace tiempo, a las puertas de su viaje a Chile el jefe de su gabinete, Onyx Lorenzoni, declaró prácticamente que la sangre que la dictadura derramó en las calles de Chile fue necesaria para que el país alcanzara los resultados macroeconómicos que muestra hoy.

Tales expresiones redoblaron el rechazo a Bolsonaro, que sin dudas es, entre los siete mandatarios presentes en esta capital, el más criticado y rechazado.

A tal punto que casi todos los senadores y diputados de oposición invitados a un almuerzo en su honor el sábado, declinaron asistir, incluidos los presidentes del Senado, Jaime Quintana, y de la Cámara de Diputados, Iván Flores.

Este último expresó que lo dicho por el jefe de gabinete de Bolsonaro “justificando el baño de sangre en Chile, es un desatino que no tiene parangón”.

 

| 23/03/2019