“Durante sus operaciones de peinado en las localidades de Yalda, Bebila y Beit Sahem en el sur de Damasco, las autoridades competentes hallaron armas y municiones abandonadas por los grupos terroristas”, informó este martes (31 de julio) la agencia SANA.

“Entre las armas halladas figuran proyectiles RPG, misiles caseros, proyectiles de artillería, además de bombas de fabricación israelíes”, detalló la fuente.

La noticia se repite cada vez que los grupos terroristas pierden terreno y abandonan sus escondites y refugios, dejando atrás “armas, municiones, documentos y medicamentos” que revelan la identidad de sus patrocinadores.

Las enormes cantidades de armas israelíes encontradas en las zonas liberadas de los terroristas en Siria demuestran la gran implicación del enemigo sionista en la guerra contra el régimen y el pueblo sirio, sin descartar el papel destructivo de otros países como Estados Unidos, Reino Unido y Francia, además de países regionales como Arabia Saudita, Qatar y Turquía.

Todos estos Estados, junto a otros, apoyaron, armaron y financiaron a los grupos terroristas operantes en Siria durante los años del conflicto. Recordemos que al principio de la “guerra contra Siria”, 120 países se reunieron bajo el nombre de “Amigos de Siria” y expresaron su clara postura de apoyar la llamada “Revolución” que durante ocho años generó masacres y destrucción en el país.

Estos mismos Estados “amigos de criminales terroristas”, no movieron ni un dedo para evitar constantes agresiones y crímenes israelíes contra el pueblo palestino, ni siquiera se atreven a señalar al asesino que ocupa Palestina desde hace setenta largos años.

Paradójicamente, los únicos que han combatido seriamente al terrorismo, al lado del Ejército sirio, Irán, Rusia y Hezbolá, están sometidos a duras sanciones por Estados Unidos.

En el caso de Irán y Hezbolá, también están amenazados continuamente por la entidad sionista y Estados Unidos, y recientemente por Arabia Saudita y otros países.

Con cada derrota de Daesh y otros grupos terroristas en Siria, los israelíes y la Administración estadounidense se ponen más nerviosos y preocupados porque su plan en Oriente Medio fracasó, y el eje de la Resistencia se hace más fuerte.