Unos 500 refugiados sirios que han residido en los últimos años en Líbano tras escapar de su país a causa de las bandas terroristas iniciaron este miércoles el retorno a sus hogares en zonas liberadas.

Los retornos se producen “de forma voluntaria” en 15 autobuses llegados a Líbano desde Damasco para proceder a los traslados.


Los refugiados han comenzado a ser trasladados desde el área de Shebaa, en el sureste de Líbano, y serán llevados a la localidad de Beit Yin, situada al suroeste de Damasco y cuyo control fue recuperado por las autoridades en diciembre.

Por su parte, la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Líbano afirmó en una serie de mensajes en su cuenta en la red social Twitter “ser consciente” de los traslados y resaltó “no estar involucrada” en la organización de los mismos.

Según los datos de ACNUR correspondientes al mes de diciembre, en Líbano residen más de 991.000 refugiados sirios, sobre un total de más de 5,6 millones de refugiados en la región.