La presencia del grupo terrorista Frente al Nusra en territorio libanés está prácticamente “eliminada”, los remanentes del grupo se refugian en una zona que cada vez está más reducida. En pocas horas o pocos días como máximo, no quedará en suelo libanés ningún armado de Al Nusra.

La amenaza terrorista se aleja para siempre con la liberación de las montañas de Arsal, limítrofe con Siria, por los combatientes de Hezbolá.

La Resistencia tomó la decisión de “aniquilar a los terroristas”, el “emir” del Al Nusra, Abu Malek Altali tiene que elegir entre “la muerte o la rendición”, aunque le queda la opción de huir hacia las zonas controladas por Daesh, o infiltrarse en un campamento de refugiados sirios “disfrazado de mujer”, como especulan algunos analistas.


Después de acabar con Al Nusra, viene el turno a Daesh que actualmente controla parte de las montañas de Arsal, además de las zonas montañosas de Ras Baalbeck y Al Qaa.

“Daesh envió intermediarios a Hezbolá para negociar su retirada de territorio libanés hacia Al Badiya siria”, afirma una fuente relacionada.

Daesh estima que la batalla “será en vano”, teniendo en cuenta la fulminante derrota de Al Nusra ante el avance de Hezbolá en los últimos días“ lo que da muestra del rumbo que tomará la próxima batalla (contra Daesh)”, señala la fuente.

Se espera que el secretario general de Hezbolá, Sayed Hassan Nasrolá, en su esperada aparición esta noche (miércoles), anuncie el fin de la ofensiva y por consiguiente el fin de la amenaza de Al Nusra en Líbano, asimismo hablará de la próxima batalla que tendrá como objetivo “eliminar a los terroristas de Daesh” en suelo libanés.