El presidente norteamericano, Donald Trump, despidió al director del Buró Federal de Investigación (FBI), James Comey, debido a su conducción de las pesquisas sobre los correos electrónicos de la excandidata presidencial demócrata Hillary Clinton.

En una carta dirigida al titular del FBI, el mandatario le informó que con efecto inmediato terminaba sus funciones y era removido del cargo, al considerar que no resulta capaz de conducir la agencia con efectividad.

“Es esencial que encontremos un nuevo liderazgo para el FBI que restablezca la confianza del público y la confianza vital para la misión de hacer cumplir la ley”, dijo.


Según The New York Times, el despido de Comey es un desenlace sorprendente si se tiene en cuenta que el presidente se benefició de las pesquisas sobre la candidata demócrata en las elecciones de 2016.

De forma separada, recordó el diario, el FBI también investiga si miembros del equipo de campaña de Trump tuvieron contactos con Rusia para influenciar en los comicios.

Para el periódico, la abrupta decisión levanta interrogantes en torno a si el mandatario estaba tratando de influenciar este último proceso.

La Casa Blanca dio a conocer que de inmediato comenzará la búsqueda de un nuevo director para la agencia federal.

Algunos demócratas compararon la medida de Trump con la “Masacre del Sábado por la Noche” de 1973, en la cual el presidente Richard Nixon despidió a un fiscal especial independiente que investigaba el escándalo de Watergate.