El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, amenazó con abofetear a los líderes de la Unión Europea que critiquen su violenta lucha contra las drogas, donde más de 8.000 personas han muerto desde que el dirigente asumiera el poder en junio del año pasado y lanzada una operación policial que ha sido responsable de al menos un tercio de estos fallecimientos, según informes de agencias internacionales.


“Venid aquí para hablar conmigo, porque quiero daros de bofetadas”, declaró Duterte este viernes durante un discurso en el palacio presidencial. Allí, Duterte ridiculizó propuestas que le ha formulado el bloque europeo para paliar los efectos de la drogodependencia con métodos pacíficos.

“Lo que quieren es que les demos cocaína y heroína, como hacen en Holanda”, denunció Duterte, que la semana pasada calificó a los integrantes de la Unión Europea de “hipócritas” e “hijos de perra” por recomendar procedimientos de rehabilitación.