El gobernador de la provincia siria de Rif Damasco, Alá Ibrahim, afirmó que continúan las negociaciones para lograr una “reconciliación local” en el valle del río Barada, que abastece de agua a Damasco.

Las conversaciones se llevan a cabo entre sirios, sin ninguna intervención de la ONU u otra parte, subrayó Ibrahim, según la agencia de noticias oficial siria, SANA.


La agencia destacó que en los últimos días 1.000 personas han regularizado su condición legal ante las autoridades en el valle, de las que 60 son combatientes.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos y el Organismo de Información del Valle del Barada informaron el jueves de un pacto para un alto el fuego y la salida de los armados que lo desearan hacia la provincia de Idleb, después de que el Ejército sirio y su aliado Hezbolá impusieran un cerco a las posiciones terroristas en el valle de Barada.

La ofensiva siria para liberar Barada de los terroristas se inició el pasado 23 de diciembre después de que los grupos terroristas dañaron las vías de suministro de agua a Damasco procedente desde el valle.