Las repercusiones de la crisis económica en Arabia Saudita siguen afectando a los trabajadores extranjeros en el reino wahabita. Decenas de trabajadores extranjeros de la empresa Binladin Group fueron condenados a flagelación y penas de cárcel, por participar en protestas por no haber cobrado sus salarios durante varios meses, informó este martes la prensa local.

El diario saudí Al Watan informó de que varios trabajadores extranjeros fueron condenados a cuatro meses de cárcel y 300 latigazos por “degradación de bienes públicos e incitación a disturbios”. Otros recibieron penas de 45 días de cárcel.


Asalariados del sector de la construcción, especialmente de las empresas Binladin Group y Saudi Oger, no recibían el pago de sus sueldos desde la caída de los ingresos petroleros del gobierno saudí, que a su vez no se lo había retribuido a las empresas privadas que operan en las grandes obras estatales.

Binladin Group es una empresa familiar fundada en 1931 por el padre del exjefe de Al Qaeda, Osama Bin Laden.

Por otra parte, decenas de miles de trabajadores de la empresa “Saudi Oger”, que es propiedad del primer ministro libanés Saad Hariri, no han recibido sus salarios desde hace varios meses.