Varias decenas de personas se manifestaron este miércoles en la capital de Marruecos, Rabat, contra la participación de la entidad sionista en la cumbre de Naciones Unidas sobre el cambio climático (COP22) que se celebra estos días en la ciudad meridional marroquí de Marrakech.

Los manifestantes se congregaron frente a la sede del Parlamento y gritaron consignas contra la normalización de relaciones con la entidad sionista que ocupa Palestina.

“La presencia de la bandera israelí en Marrakech atenta contra nuestros sentimientos y nuestra dignidad. No podemos aceptar esta normalización”, dijo Abdelali Alami, coordinador del Grupo de Acción por Palestina, en una declaración a la prensa.


Al final de la protesta, en la que participaron activistas de diferentes tendencias políticas, los manifestantes quemaron la bandera israelí.

El presidente de la COP22, el marroquí Salahedin Mezuar, salió al paso de las críticas que le fueron dirigidas por la participación de la entidad sionista y aseguró que Marruecos es “anfitrión de un evento organizado por Naciones Unidas que reúne a todos los miembros de la Convención marco sobre el cambio climático”.

“La lucha contra el cambio climático necesita el compromiso de todo el mundo”, dijo Mezuar quien precisó al mismo tiempo que su país es el “primer defensor de la causa palestina”.

Marruecos siempre ha reivindicado su legado judío y ofrece protección especial a la comunidad hebrea en el país. No obstante, entre la opinión pública y los partidos políticos hay una gran hostilidad a toda aproximación hacia la entidad sionista, alimentada por los constantes crímenes israelíes contra la población palestina.