El líder de un grupo antigubernamental de Camboya, que cumplía largas penas de prisión por planear atentados con bomba en Phnom Penh, se dio a la fuga tras drogar a los guardas que le custodiaban, informó la prensa local.

Som Ek, líder del Movimiento Cabeza de Tigre, fue condenado en 2010 a 28 años de cárcel por intentar atentar con bomba un año antes contra el ministerio de Defensa y la televisión TV3, y a 18 años por haberlo intentado contra un monumento de la capital en 2007.


El preso huyó el sábado por la noche de un hospital en el que había sido ingresado dos días antes tras sufrir un desmayo, al aprovechar que los guardas que lo vigilaban se durmieron, informó el diario Phnom Penh Post.

El responsable de la prisión, Phin Yan, indicó al periódico que los vigilantes perdieron el conocimiento tras ingerir comida que les ofreció la familia del preso.

“Debía ser comida con droga y cuando se despertaron una media hora más tarde el prisionero se había ido (...) Se quitó las esposas de los pies y huyó mientras (los guardas) estaban inconscientes”, explicó.

Ek fue detenido en enero de 2009 tras el hallazgo de varias bombas sin estallar en la ciudad, y admitió haber planeado los atentados, aunque posteriormente dijo que había confesado bajo presiones y aseguró que su organización es de carácter pacífico.