El asesor especial del presidente del Parlamento iraní, Hussein Amir Abdollahian, consideró que el respaldo del secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abu Alghet, a Riad como “actos no responsables que socavan la credibilidad de la organización árabe como nunca antes”.

“En lugar de apoyar las agresiones militares saudíes en Yemen, Siria, Bahréin e Iraq, sus amenazas a la seguridad regional, así como la incompetencia en gestionar la Hajj (peregrinación), la Liga Árabe debe tratar de hallar una solución para el dilema palestino y condenar la actitud saudí en apoyo al terrorismo”, dijo Abdollahian.


Por su parte, el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Bahram Qassemi, fustigó la declaración adoptada el jueves en El Cairo por los cancilleres árabes que rechazó lo que consideró injerencia iraní en los asuntos internos de Arabia Saudita.

La organización también reprobó el mensaje del líder iraní, Ali Jamenei, que denunció abusos a la mayoritaria población chiita de Bahréin, la crueldad de la guerra desatada por el régimen saudí en Yemen y el apoyo de Riad a grupos terroristas en Siria e Iraq.

“Si el Consejo es honesto en su tendencia a contribuir a la coexistencia pacífica entre las naciones y mantener una voluntad seria para crear convergencia y fortalecer buenas relaciones de vecindad en la región, necesita detener el apoyo poco constructivo a Riad”, indicó Qassemi.