Italia rinde tributo hoy a las víctimas del terremoto que hace apenas tres días devastó extensas zonas de la región central del país, con un saldo preliminar de 284 muertos y 388 heridos.

La bandera nacional a media asta en las instituciones públicas y ceremonias fúnebres con la presencia de las principales figuras del estado y el gobierno, son algunas de las manifestaciones de pesar ante la tragedia.


En camino a la ciudad de Ascoli Piceno para asistir al funeral de los 49 fallecidos en Arquata y Pescara del Tronto, el presidente Sergio Mattarella visitó Amatricie, el centro urbano más duramente golpeado por el sismo.

El número de muertos en Amatrice aumentó a 224 en las últimas horas con la recuperación de otros tres cadáveres de las ruinas del emblemático hotel Roma, donde brigadas de rescate y salvamento persisten en la búsqueda de sobrevivientes a pesar del tiempo transcurrido.


Mientras tanto, continúan las réplicas de diversa magnitud en la región central de la península, con más de mil 300 hasta el momento, incluyendo una de 4 grados en la escala de Richter registrada al amanecer por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología.

De Amatricie el presidente se dirigió a la vecina Acumoli, en cuyas inmediaciones se localizó el epicentro del terremoto del 24 de agosto último y donde perecieron 11 personas.