El líder supremo de Irán, el gran Ayatolá Ali Jameneí, afirmó que su país “se mantiene a distancia de Estados Unidos” y que la República Islámica “nunca se retractará” de este “básico concepto” fundado por el Imam Jomeini, asegurando que “esta cuestión no admite negligencia ni compromisos”.

“Mantener la distancia de la cabeza del movimiento arrogante (los EEUU) era uno de los principios más importantes y definitivos del gran fundador de la República Islámica (Ruholá Jomeini), y aquí no hay lugar para ningún compromiso o negligencia en este aspecto”, sentenció.


Durante un encuentro con funcionarios del Ministerio de Inteligencia, a los que calificó como “bastión” en defensa de la revolución islámica, y el “ojo que vela por la seguridad”, el líder iraní manifestó que “el Ministerio de Inteligencia es la corteza protectora del régimen islámico y nunca debería volverse vulnerable”.

Además, apuntó que el trabajo del Ministerio también es el de proteger “la fe” de los iraníes y consideró que cualquier movimiento orientado a “debilitar” las creencias del pueblo es “traición”.

“El poder defensivo que ha mantenido al país durante todos estos años ha sido el poder de la fe y, si esta fuerte y eficiente arma es debilitada, nos conducirá a muchos problemas”, indicó.

Así, el líder dejó claro por enésima vez su rechazo a los EEUU y a cualquier aproximación a Washington tras el acuerdo nuclear, un movimiento que muchos esperaban que podría producirse.