Las autoridades de Bangladesh están hoy en alerta ante la posibilidad de nuevos ataques terroristas ejecutados por grupos terroristas presentes en el territorio nacional, una situación que mantiene en vilo a esta nación surasiática.

Durante una teleconferencia con funcionarios y personalidades de diversas esferas bangladeshíes, la primera ministra Sheikh Hasina advirtió que los “extremistas planean nuevas operaciones”.


En ese sentido, recordó el reciente ataque contra una concentración religiosa en Sholakia, en el norteño distrito de Kishoreganj Sadar, que causó cuatro muertos, y el asalto contra un restaurante en esta capital, que terminó con saldo de 28 fallecidos, 20 de ellos rehenes.

“Hay varias conspiraciones en marcha, estamos recopilando informes de inteligencia de fuentes nacionales y extranjeras”, reveló la jefa de gobierno, quien acusó a miembros de la ilegalizada formación Jamaat Islami y del opositor Partido Nacionalista de participar en ese complot.

Bangladesh, con una población de 160 millones de habitantes, sufre una ola de violencia sin precedente por parte de grupos terroristas contra homosexuales, extranjeros, críticos del radicalismo y miembros de minorías religiosas.