Pese a los esfuerzos para lograr un alto el fuego duradero en el campamento de refugiados palestinos de Ain al Helue, ubicado en el sur de Líbano, los enfrentamientos se reanudaron entre el Movimiento Al Fatah y milicianos del grupo extremista llamado Jund al Sham desde anoche hasta las primeras horas de la mañana de hoy (miércoles). Miles de bombas aterrorizaron a la población del campo y los residentes en los alrededores.


La ciudad de Saida no se libró de los francotiradores, los disparos alcanzaron varios barrios cercanos al campamento, provocando la muerte de una persona y heridas a otras seis.

Un líder palestino acusó a las “fuerzas oscuras” de provocar los combates. El coronel de Al Fataf, Mahmud Isa, más conocido como “el Lino”, dijo que en Ain al Helue “estamos defendiéndonos ante las agresiones de las fuerzas oscuras”, y aseguró que el Movimiento (Al Fatah) nunca será parte de un plan “contra la causa palestina y la seguridad de su pueblo”.


A causa de los choques, decenas de familias abandonaron el campamento, en dirección a Saida, domde la Policía municipal les proporcionó ayuda y alojamiento, además de atención sanitaria en casos necesarios.