La operación militar en el norte de Líbano contra los terroristas de Daesh y Al Nusra todavía no ha concluido, no obstante logró uno de sus principales objetivos, frustrar el diabólica plan que se preparaba para Líbano al estilo de lo que ocurrió en Iraq el mes de agosto pasado, y por consiguiente evitar una gran “catástrofe” a nivel nacional.

Es cierto que la ofensiva iniciada el sábado por las Fuerzas Armadas de Líbano contra las células terroristas en la ciudad de Trípoli y luego en la región de Akkar viene en el marco de la decisión del Ejército de erradicar el terrorismo del territorio libanés, pero también tiene mucho que ver con informaciones sobre un plan terrorista consistente en aislar Trípoli y Akkar (norte) del resto del territorio nacional, paso previo para conectarla a través del este con la región de Arsal donde se refugian miles de terroristas huidos de Siria.

Lo que está ocurriendo actualmente en el norte de Líbano no es nada casual. Los combates entre el Ejército y células terroristas pertenecientes a los grupos de Daesh y Frente al-Nusra, forma parte de un plan global para dividir todo Oriente medio.


Los terroristas  se movieron tras la operación militar del Ejército en la localidad de Asun, donde fue desmantelada una célula terrorista y cuyo jefe (Ahmed salim Mikati) fue arrestado. Este golpe asestado a los terroristas y la pérdida de un cabecilla de “alto rango” impulsó a que los terroristas adelantaran la “hora cero” y respondieran en Trípoli.

El Ejército ya había tomado las medidas necesarias y declaró “guerra abierta” contra los terroristas que, según varias fuentes, planeaban un masivo ataque contra puestos del Ejército en el norte, hacer explotar coches bomba en varias zonas del país y simultáneamente bloquear las carreteras de acceso a la ciudad de Trípoli para luego declararla un “emirato”.

Los explosivos incautados y la cantidad de armas en manos de los terroristas, así como la distribución de los grupos armados dentro de la ciudad demuestran el tamaño de la “catástrofe” que pudiera haber causado ese diabólico plan.

Las últimas noticias indican que los terroristas se retiraban de las zonas de combate y se dirigían a zonas rurales. Si bien su plan ha fracasado de momento, esto no quiere decir que no puedan repetirlo. La amenaza terrorista es muy seria.