El Ejército libanés arrestó a 21 hombres involucrados en acciones armadas en la ciudad norteña de Trípoli, pocas horas después de haber sido encargado de dirigir los cuerpos de seguridad, informaron fuentes oficiales.


Los detenidos son miembros de milicias que desde el fin de semana pasado reiniciaron choques armados que han causado la muerte a entre 12 y 15 personas y heridas a 112, según los recuentos de las autoridades.

Asimismo, las fuentes castrenses anunciaron que buscan a dos jefes de milicias acusados de instigar el inicio de los combates que han causado grandes pérdidas materiales y en los cuales los contrincantes han empleado armas pesadas.

Los combates entre los sunitas, residentes en el distrito de Bab El Tabaneh, y los alawitas, asentados en el de Jabal Mohsen, comenzaron el sábado pasado y se reeditaron de manera esporádica hasta que el primer ministro Nayib Miqati anunció el lunes que el Ejército controlará por seis meses el mantenimiento del orden, sin llegar a poner la ciudad bajo autoridad castrense.


Esta es la decimoctava ocasión en los últimos dos años en que se registran choques armados en Trípoli, la segunda ciudad libanesa en importancia, donde más de 110 personas, en su mayoría civiles han perdido la vida.