Hija del histórico Che Guevara define a Nasrolá símbolo de la lucha anticolonialista

La activista cubana internacionalista, doctora Aleida Guevara March, definió al mártir de la Resistencia de Líbano, Sayed Hasan Nasrolá, como un “símbolo de la lucha anticolonialista y por la dignidad de su pueblo”.

“Hay hombres a quienes los define su lucha, seres humanos con una integridad y una coherencia tal que son capaces de luchar hasta las últimas consecuencias por sus principios y sus ideales”, fueron sus palabras en un mensaje exclusivo para la cadena libanesa “Al Mayadeen”.

A propósito de la cobertura especial por los líderes mártires de la Resistencia de Líbano, Guevara reconoció que “los pueblos son capaces de identificar a aquellos hombres y mujeres que luchan por ellos, que los defienden y, por tanto, los aman”.

Sayed Nasrolá fue uno de esos hombres que “tuvo la estirpe de los líderes, de los que ven más y más lejos”. “Lo dio todo por la causa y todo lo pudo para evitar que el enemigo israelí mancillara a su pueblo”, agregó la médico e hija del guerrillero Ernesto Che Guevara.

En relación con la personalidad del líder mártir de Hezbolá añadió: “Los que lo conocieron dicen que tenía la mirada chispeante, brillante y su palabra encendida era capaz de darle fuerza a quien lo escuchaba”.

Con palabras del último discurso del Sayed Nasrolá, Guevara convocó a mantener la batalla a nivel global en momentos en los que “el imperialismo muestra su cara fascista”. “El enemigo no comprende la profundidad moral, cultural y espiritual de nuestra lucha”, recordó así la sentencia del líder mártir.

“Trata de hacernos entender que son invencibles para frenarnos por el miedo, para que ellos puedan seguir robando nuestros recursos naturales, nuestras tierras y hasta nuestros sueños”, denunció la activista cubana.

De acuerdo a sus declaraciones, el enemigo teme a líderes como Hasan Nasrolá que son capaces de frenarlo y, por eso, los prefieren muertos.

“Hay hombres que están conformados por su lucha, están hechos de esa lucha”, dijo Guevara, señalando que “si otros hombres y mujeres son capaces de continuar este camino, entonces la muerte no es verdad. Es la hora de la vida”.

Concluyó: “Una aspiración común, la derrota del imperialismo, nos une en nuestra marcha hacia el futuro. Hasta la victoria siempre, patria o muerte”.