Riad busca vengarse de Líbano por perder la guerra en Yemen

En medio de un aumento de las tensiones entre Líbano y Arabia Saudí, Mohamed Raad, el jefe del bloque parlamentario del Movimiento de Resistencia Islámica de Líbano (Hezbolá), manifestó el sábado que Riad trata de tomar venganza de Beirut por su apoyo a la nación yemení frente a la devastadora agresión de la llamada ‘coalición’, liderada por el reino saudí.

En declaraciones al portal Al-Ahed News, Raad recalcó que hoy, Asia Occidental se enfrenta a una “crisis creada por uno de los países de la región que lanzó una guerra cruel contra otro país árabe y la perdió”, refiriéndose así a la agresión lanzada por Arabia Saudí y sus aliados contra Yemen desde 2015.

“El país que perdió la guerra ahora intenta vengarse, tras su derrota, de Líbano, ya que Beirut apoyó a la nación oprimida que ha estado bajo invasión durante casi siete años y cuyo país ha sido destruido en medio de los intentos de algunas partes para hacer que se rindiera”, señaló.

En una entrevista emitida el pasado lunes, el ministro de Información libanés, George Kordahi, declaró que la guerra en Yemen fue una agresión de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), para luego resaltar que esta ofensiva “absurda” debería detenerse.

Kordahi puso énfasis en que las fuerzas del Ejército yemení y los combatientes del movimiento popular Ansarolá se estaban “defendiendo”, ya que “sus hogares, pueblos, funerales y bodas están siendo bombardeados” por la ‘coalición’ saudí-estadounidense.

Enfurecido por las críticas del alto funcionario libanés, Arabia Saudí ordenó el viernes al embajador de Líbano que abandonara el territorio saudí en 48 horas y prohibió todas las importaciones de ese país.

En solidaridad con Riad, Kuwait y Bahréin, a su vez, siguieron las mismas medidas y mandaron el sábado a los embajadores de Líbano que salieran de sus países en dos días. Asimismo, EAU anunció la misma jornada que retiraba a sus diplomáticos de Líbano.

Ante tal coyuntura, Raad aseveró que el ataque verbal contra Kordahi puede tener como objetivo socavar la “estabilidad” que prevalecía en Líbano después de la reciente formación del Gobierno, que puso fin a un estancamiento político de más de un año en el país.

Los que están creando una crisis para Líbano buscan perturbar las elecciones generales de 2022 del país, porque pueden haberse dado cuenta de que los resultados no serían de su interés, puntualizó el legislador libanés.