El jefe del Estado Mayor de la ocupación israelí, teniente general Gadi Eisenkot, se reunió con el nuevo comandante de las Fuerzas de la ONU en Líbano (FINUL), Stefano del Col, y le exigió una postura más dura y proactiva contra Hezbolá, informaron medios israelíes.

Según el diario “Israel Hayom”, Eisenkot pidió la semana pasada al general italiano, nombrado a principios de agosto en sustitución del irlandés Michael Beary, que lidie con las presuntas violaciones de Hezbolá a la resolución 1701 de la ONU, que puso fin a la agresión israelí de 2006 contra Líbano, en la que Hezbolá salió triunfador.

El militar sionista insistió en la necesidad de que la FINUL opere más vigorosamente contra “todo lo relacionado con el trabajo de fortificación de Hezbolá y las actividades de almacenamiento de armas en las aldeas y pueblos del sur del Líbano”, remarca el rotativo.

Eisenkot también criticó la tarea anterior de Beary, al que el régimen sionista considera que no actuó de manera suficientemente activa durante su mandato al frente de la misión de 10.500 cascos azules, incluidas tropas españolas, que patrullan día y noche la frontera libanesa con Palestina (ocupada por la entidad sionista) para mantener el cese de hostilidades entre ambos bandos.

Las autoridades israelíes se muestran desde hace tiempo preocupadas de que la misión de la ONU “no opere en absoluto contra Hezbolá en las zonas urbanas del sur del Líbano”, una posición que, a su entender, “ha resultado en que Hezbolá convierta a más de 200 aldeas chiíes en complejos de combate fortificados”.