El secretario general de Hezbolá, Sayed Hassan Nasrolá, ratificó que la ciudad santa de Al Quds es “la esencia del símbolo actual del conflicto que dura más de 70 años”.

En un discueso pronunciado con motivo del Día Internacional de Al Quds, el líder de la Resistencia puntualizó que la trama más peligrosa del complot contra Palestina y Al Quds es el llamado “acuerdo del siglo” que pretende “aniquilar la causa palestina y entregar los lugares santos a los ocupantes”.

Nasrolá indicó que escogieron celebrar la jornada en la localidad de Maroun al-Ras, muy cerca de la frontera libanesa con los territorios ocupados por la entidad sionista.

De esa manera, apuntó, tratamos de reactivar la defensa de la causa del pueblo palestino que ahora enfrenta represiones del ejército de Tel Aviv contra manifestaciones pacíficas como resultado de las cuales hay un saldo de centenares de muertos y miles de heridos.

Nasrolá agregó que Al Quds enfrenta hoy tres retos, la primera la batalla por no reconocerla como capital de la entidad sionista y no someterla a esa decisión del gobierno norteamericano; impedir cambios de identidad demográfica, y proteger los lugares sagrados de musulmanes y cristianos.

El líder de Hezbolá explicó que la permanencia de palestinos, musulmanes y cristianos en Al Quds, impide la judaización de la ciudad y los convierte en guardias de la ciudad santa.

“Quien protege la identidad de la ciudad y sus lugares sagrados es el pueblo de Al Quds, pese a duras condiciones impuestas por la entidad sionista”, acotó.

También denunció maniobras que pretenden desnaturalizar la ciudad santa de Al Quds.

Y lo más reciente dentro de las maniobras para usurpar al sagrado centro urbano, es, reveló, la compra de propiedades e inmuebles por ciudadanos de países del golfo Pérsico con la intención de luego venderlas a los israelíes.

En relación a la presencia militar de Hezbolá en Siria, aclaró que “estamos en Siria por petición del Gobierno sirio”, y por el deber de “defender uno de los pilares de la Resistencia en la región”.

Asimismo condicionó la retirada de Hezbolá de Siria con “el exterminio de los grupos terroristas”, ya que entonces “habremos cumplido la misión y estaremos contentos de que nuestros jóvenes regresen a sus hogares”, afirmó.

Al mismo tiempo, aseguró que Al Quds será liberada, y que el día de la gran batalla, el día en que “oraremos en la mezquita de Al Quds” es próximo.

“Al Quds será liberada, y retornará a sus legítimos dueños, esto está seguro”, aseveró.

Y dirigiéndose a los invasores sionistas dijo “embarcad en vuestros barcos y aviones y regresad a donde procedéis”, antes de que sea demasiado tarde. “El día de la gran batalla está cerca, en ese día oraremos en Al Quds”, concluyó.