El secretario general de Hezbolá, Sayed Hassan Nasrolá, aseguró que la Resistencia que derrotó y humilló al enemigo israelí en el año 2000, hoy está más fuerte y más determinada.

Durante un discurso televisado en el Día de la Resistencia y la Liberación, el líder de Hezbolá recordó que la Resistencia obligó a las tropas israelíes ocupantes salir del sur de Líbano “derrotadas y humilladas” aquel 25 de mayo del 2000. “El ejército del enemigo sionista no podía soportar el alto precio de la ocupación, el nivel de pérdidas en sus filas era demasiado alto” por los golpes de la Resistencia, señaló Nasrolá.

“Además de los resistentes de Hezbolá, también el Ejército libanés y el Ejército sirio junto a la Resistencia palestina contribuyeron en lograr esa gran victoria”, añadió.

Nasrolá afirmó que los resistentes en Líbano y la región “creen en su causa y están dispuestos a sacrificar por ella”, “desde el año 1982, la Resistencia se opuso a los planes estadounidenses y sionistas y consiguió expulsar a la ocupación”, es normal que esa Resistencia sea vista por el enemigo como amenaza a sus intereses, explicó Nasrolá.

Indicó que la Resistencia que logró la victoria en el año 2000 está hoy más fuerte, firme y decidida. “No buscamos la guerra, pero no la tememos. Estoy seguro que venceremos en caso de una posible agresión israelí”, aseveró.

El líder de la Resistencia rechazó las sanciones impuestas por Estados Unidos y Arabia Saudita contra Hezbolá, las cuales, aseguró, no crearán ningún daño material, porque “no adelantan ni retrasan” nada, y entran en el marco de “presionar al ambiente favorable a la Resistencia”.

Estados Unidos y Arabia Saudita intentan castigar a quien derrotó al ejército israelí y contribuye a desbaratar proyectos norteamericanos e israelíes en la región, apuntó.

Nasrolá afirmó que Hezbolá no realiza operaciones comerciales con el extranjero, y explicó que, aunque las sanciones causarán daño, no son comparables con los sacrificios de los mártires, quienes entregaron su vida para vencer al enemigo.