El secretario general de Hezbolá, Sayed Hassan Nasrolá, reveló que Estados Unidos y Occidente ofrecieron miles de millones de dólares a Hezbolá, a cambio de entregar sus armas.

Durante una alocución este domingo, en un acto público celebrado en la ciudad de Nabatieh bajo el lema “fidelidad a la victoria”, el líder de la Resistencia precisó que la oferta tuvo lugar después de los ataques del 11 de septiembre contra las Torres Gemelas de Nueva York.

La oferta de miles de millones de dólares, explicó, era un intercambio de dinero por cooperación y renuncia a la resistencia contra la entidad sionista.


En 2005, apuntó, potencias occidentales también realizaron un ofrecimiento similar y un año después hubo otro plan para desarmar a Hezbolá, a lo que se sumó, dijo, una agresión del enemigo israelí contra Líbano que terminó en derrota para los invasores.

Nasrolá denunció continuos proyectos enemigos y conspiraciones para una guerra civil en Líbano.

“Lo más grave que planeaban contra la Resistencia es una guerra civil provocada por enfrentamientos entre el ejército libanés y Hezbolá”, apuntó.

“En julio del 2006, en pleno combate contra el enemigo sionista, el entonces primer ministro libanés dio orden explicita de confiscar las armas de la Resistencia” con el objetivo de provocar enfrentamientos internos, explicó.

Ese plan formaba parte de una conspiración contra la estabilidad y seguridad de Líbano, a manera de facilitar al enemigo israelí la ocupación del país, aseveró.


Nasrolá reiteró que el conflicto con los sionistas “no ha terminado”, “hay continuas amenazas por parte de los israelíes”, añadió. “La garantía más fuerte que protege la estabilidad y la seguridad del país consiste en la unidad del pueblo, sumada a la Resistencia y el Ejército”, insistió.

El líder de Hezbolá exhortó a una gran participación en las próximas elecciones el día 6 de mayo, y votar a los “que defienden los intereses del país ante las avaricias sionistas y defienden la Resistencia”.

En otra parte de su discurso, el líder de Hezbolá felicitó al pueblo palestino por su enfrentamiento con el ejército israelí ocupante, cuya brutal represión causó decenas de muertos y miles de heridas.

De igual manera se refirió a los yemenitas que combaten y resisten a una coalición liderada por Arabia Saudita y apoyada por Estados Unidos y países occidentales.