La segunda fase de la “Operación Retorno” de refugiados sirios a Siria, desde Líbano, ha concluido con éxito. Decenas de familias abandonaron el campamento de refugiados en la región libanesa de Arsal y regresaron a sus pueblos en la parte siria de Qalamun, sobre todo a la localidad de Asal al Ward.

Un segundo grupo de desplazados inició el camino de “vuelta a casa” la tarde del miércoles, a bordo de 23 vehículos, gracias a un acuerdo mediado por Hezbolá.


El Ejército libanés ha escoltado a unas 250 personas, desde los campamentos hasta la frontera con Siria, de donde los “ex-refugiados” se dirigieron a la ciudad siria de Asal al Ward, al noreste de Damasco.

Este es el segundo grupo de refugiados sirios que regresan a su país a través de la frontera libanesa, coordinado por Hezbolá con el Ejército libanés y el Gobierno sirio, por separado, asegurando vías para que los refugiados que quieran regresen a su país.

Varios refugiados se han mostrado ansiosos por volver a su ciudad natal después de varios años en campamentos improvisados en la ciudad fronteriza libanesa.

“Las operaciones de retorno continuarán” en los próximos días, declaró el jefe de la “Unión de Personalidades en Qalamun”, Mohamed Taha, afirmando que hasta la fecha más de un millar de sirios han regresado a sus casas.