El Ministerio de Asuntos Exteriores y Emigrantes de Líbano sigue de cerca la operación militar lanzada por el Gobierno iraquí en la madrugada del lunes 17 de octubre de 2016 para liberar la ciudad de Mosul y el resto de la provincia de Ninawa, que está desde hace más de dos años bajo el yugo de la organización terrorista Daesh.


El Ministerio alabó en un comunicado “las rápidas victorias logradas por el Ejército iraquí y las fuerzas de seguridad iraquíes contra los terroristas de Daesh, y su éxito en los primeros días de operaciones en liberar decenas de pueblos de la mano de esta organización takfirí”, y subrayó “la necesidad de prestar la atención necesaria a esos pueblos para permitir el regreso de sus habitantes desplazados”.

“La operación de libración de Mosul es un momento crucial en la campaña que libran las autoridades iraquíes contra Daesh”, añadió, y aseguró que “Líbano respalda a Iraq, su Gobierno y su pueblo, se solidariza con ellos en su lucha contra el enemigo común representado por el terrorismo oscuro hasta su erradicación y desaparición definitiva, para evitar la repetición de la tragedia de Mosul en otros lugares de la región”.