Decenas de padres de mártires de la Resistencia Islámica han visitado ayer lunes las posiciones militares de Hezbolá en la sierra oriental de Líbano, donde sus hijos lucharon contra los grupos terroristas y sacrificaron sus vidas para recuperar esa región y limpiarla de la plaga takfirí.


Con motivo del Día del Mártir, que coincide con el 11 de noviembre, Hezbolá ha organizado una gira, en colaboración con la Asociación de Al-Shahid, a la región de Qalamún para los padres de los mártires de la Resistencia Islámica, quienes mostraron su orgullo por el “martirio de sus hijos” y las victorias conseguidas por ellos.

Los visitantes, que han sido recibidos por un grupo de combatientes de Hezbolá, reafirmaron su lealtad al Líder de la Resistencia (el secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrolá) y aseguraron que seguirían el “camino de la Resistencia” de sus mártires hijos.


Un oficial de la Resistencia explicó a los visitantes la situación actual en la zona y detalló cómo ocurrieron las operaciones que culminaron con la derrota takfirí en esta zona fronteriza con Siria.

Por su parte, uno de los padres, hablando por el nombre de todo el grupo, dijo que “estamos dispuestos a cualquier sacrificio” por la Resistencia que “mantiene nuestras cabezas altas”, y aseguró que “estaremos donde debemos estar y donde nos manda estar” en referencia al líder de la Resistencia, Hassan Nasrolá.


Asimismo aseguró que la batalla contra los grupos terroristas takfiríes es una continuación a la batalla contra el enemigo sionista. “El enemigo israelí que fue derrotado por la Resistencia intenta entrar por la puerta trasera a través de Daesh y sus colegas, porque es incapaz de enfrentar a la Resistencia directamente”, dijo.