Líbano
El soldado que regresó a su casa… decapitado
Fnaideq se viste de luto por el asesinato de Ali al-Sayed
Especial Alahednews
La pequeña localidad en el norte de Líbano, Fnaideq, se vistió de negro y anunció el luto en el pueblo, incluso antes de conocer el resultado de los análisis del ADN del soldado Ali al-Sayed, secuestrado y decapitado por las milicias terroristas.
“Nuestro Gobierno nos ha humillado”, dice uno de los parientes del militar asesinado. “desde que difundieron el vídeo de su decapitación hemos intentado convencer a su madre que no era él, pero ella estaba convencida de que se trataba de su hijo”, añadió.
Los familiares de Alí, así como el vecindario de Fnaideq, recibieron con amargura y rabia el cuerpo sin vida del soldado que fue enterrado esta mañana.
El cadáver de Ali había sido entregado por sus secuestradores al Comité de Ulemas en la localidad de Arsal (donde fue secuestrado), que a su vez lo entregó al Ejército libanés.
Una vez realizados los exámenes necesarios y confirmada su identidad en el hospital militar en Beirut, fue entregado esta mañana a sus familiares para ser sepultado como es debido en su pueblo natal, Fnaideq.
Ali al-Sayed, nacido el 15-07-1985, se alistó en las Fuerzas Armadas el cuatro de septiembre de 2006, casado y con un hijo.
Los terroristas del Estado Islámico (Daesh) y del Frente al Nusra se enfrentaron con el Ejército libanés a comienzos de agosto en la localidad de Arsal y sus alrededores, limítrofes con Siria, y después de seis días de combates se retiraron llevándose con ellos una treintena de soldados y policías.
En una cuenta de Twitter, un terrorista de Daesh, Abu Musab Hafiz al Bagdadi, mostró una foto en la que aparecía decapitando a un hombre con los ojos vendados y a quien identificó como el citado soldado.