Trípoli - Alahednews

Las manifestaciones del ex primer ministro libanés Saad Hariri resume la situación violenta que vive la capital norteña de Líbano, Trípoli, desde hace meses. Hariri declaró que “no hay plan de seguridad que valga, protegeremos las armas en Trípoli”.

Con esta clara declaración, el líder del partido Mustaqbal, otorga su bendición a las bandas armadas que controlan las callejuelas de Trípoli y atacan al barrio de “Yabal Mohsen” de minoría alauita.


Fuentes del partido Árabe Democrático en Yabal Mohsen aseguran que existe un plan para “eliminar a los alauitas en el Norte”, y afirman que “los criminales se mueven libremente, y los dirige el grupo del General Ashraf Rifi, el líder militar de Al-Mustaqbal Amid Hamoud y el parlamentario Mohamed Kabara”.

El propósito de los continuos ataques de estos grupos a la población de Yabal Mohsen, según la fuente, es “iniciar una amplia batalla contra este barrio, acorde a unos planes ya preparados”, y “expulsar del barrio a todos los que no comparten las mismas ideas del partido Al-Mustaqbal”.


Desde hace semanas las bandas armadas persiguen a los obreros de residentes en el barrio de Yabal Mohsen mientras se trasladan dentro de la ciudad yendo a su trabajo y los disparan en las piernas. Estas bandas dispersas en la ciudad cuenta con La cubertura política de varios influyentes en la ciudad.

“La situación es muy tensa, el barrio está asediado, aquel que sale de la zona se juega la vida”, expresa la misma fuente de Yabal Mohsen.

“Trípoli está en manos de los criminales y asesinos, pero esto no puede seguir así para siempre, la opción de la guerra es mejor que aceptar el asedio”, añadió.