Internacional
Ministro sirio advierte
Ataque militar a Siria tendrá graves consecuencias
Un posible ataque militar contra Siria será respondido de forma contundente y acarreará graves consecuencias para todo Oriente Medio, advirtió el ministro de Información, Omran al-Zoubi, durante una entrevista con el canal satelital libanés al-Mayadeen.
No será un picnic para nadie bajo ninguna circunstancia, porque una agresión tendría graves repercusiones y sería una bola de fuego que quemaría a Siria, pero también haría arder toda la región, argumentó el funcionario.
Tales declaraciones ocurren en momentos en que Estados Unidos y varios de sus aliados europeos y árabes sopesan opciones para iniciar una posible agresión militar contra esta nación mesoriental, a cuyo gobierno acusan del supuesto uso de armas químicas.
Al-Zoubi explicó al respecto que los intentos de Washington para ejercer presión sobre Damasco jamás tendrán resultado, "pues el Gobierno sirio seguirá luchando hasta el final contra los terroristas", enfatizó.
Al mismo tiempo rechazó las acusaciones por el uso de agentes tóxicos contra civiles, y explicó que el Ejército Árabe Sirio halló el sábado un arsenal con dichas sustancias en un refugio de opositores armados cerca de la capital, con la inscripción Hecho en Arabia Saudita.
Nunca hemos utilizado armas químicas en Siria, en ninguna forma, sea líquido o gas, recalcó el ministro.
Consideró además que el empleo de estas sustancias por grupos de mercenarios y radicales amparados por los mismos gobiernos que acusan a las autoridades sirias, demuestra su incompetencia y confusión.
El 21 de agosto fuerzas de la llamada oposición armada acusaron al gobierno de efectuar un supuesto ataque con gas en Ghouta Oriental, localidad de la provincia de Damasco Campo, hecho desmentido de manera categórica por las autoridades.
La acción terrorista ocurrió tres días después de que llegara al país un equipo de expertos de la ONU, invitado por el gobierno, para efectuar pesquisas sobre las múltiples denuncias por el uso de armas químicas, que las autoridades sirias atribuyen a fundamentalistas afiliados a la organización terrorista Al Qaeda.