El destino de los obispos ortodoxos sirios Bulos Yazighi y Yuhanna Ibrahim permanece en incertidumbre, mientras diversas informaciones apuntan a habrían sido asesinados a finales de mayo, por un grupo extremista takfirí denominado "Partidarios del Califato".

Esta posibilidad estaría basada en supuestos reportes de rebeldes sirios y de inteligencia de autoridades de Turquía, país indicado por líderes religiosos ortodoxos como el paradero de los obispos tras su secuestro, el 22 de abril.

Sin embargo, en declaraciones para la agencia vaticana Fides el 10 de agosto, el asistente del patriarca en el Patriarcado Sirio Ortodoxo de Antioquía, el obispo Timotheus Matta Fadil Alkhouri, aseguró que "hasta el momento no tenemos ninguna pista que contradiga la esperanza de que están vivos y con buena salud".

"La verdad es que hasta hoy no sabemos realmente quién los secuestró", dijo.


El obispo ortodoxo aseguró que "pedimos a Dios que los proteja", y señaló que "sólo quisiéramos hacer contactos reales y serios con quienes realmente sepan lo que debemos hacer para lograr su liberación".

El religioso ortodoxo sirio señaló que actualmente están a la expectativa de noticias oficiales de gobiernos, organizaciones no gubernamentales, la policía y "gente de buena voluntad", para conocer "información relevante con respecto a la situación concreta de los obispos Ibrahim y Yazighi, "así como del sacerdote católico armenio Michel Kayyal y el griego ortodoxo Maher Mahfouz, secuestrados el 9 de febrero de este año".

El obispo metropolita de Alepo y Alejandría, Bulos Yazighi, y el metropolita siriaco ortodoxo de Alepo, Yuhanna Ibrahim, fueron secuestrados en abril por un grupo armado que asesinó al sacerdote católico que los acompañaba.

Los prelados se dirigían en coche desde un área cerca de Turquía, donde trataban de obtener la liberación de dos sacerdotes secuestrados meses atrás.