Internacional
Egipto: El día después
Éxito del plan de desmantelamiento de las acampadas, según Interior
Las fuerzas egipcias completaron la dispersión y el desmantelamiento de los campamentos de protesta de leales al derrocado presidente Mohamed Mursi en Al-Nahda y Rabia el-Adawia.
La cifra de víctimas mortales es imprecisa, ya que fuentes del Partido Libertad y Justicia, el brazo político de la Hermandad Musulmana aseguran que los muertos sobrepasan el medio centenar, los heridos superan los mil y alrededor de 200 personas han sido arrestadas. Resulta imposible verificar la veracidad de los informes debido a la confusión reinante.
El Ministro del Interior asegura el éxito del plan y el fin de las acampadas
El Ministro del Interior Mohamed Ibrahim declaró que el desalojo de las acampadas ha sido por el rechazo de los Hermanos Musulmanes a todas las iniciativas propuestas y el fin del plazo fijado.
Ibrahim aseguró en una conversación telefónica con el canal privado “El Mehwar” que la operación del desmantelamiento ha tenido existo 100 por ciento y que harán frente a las reacciones de los simpatizantes del depuesto presidente.
“Sabemos que habrán reacciones entre ellas la ocupación de las plazas y el corte de carreteras y le vamos a hacer frente con severidad”, añadió Ibrahim.
Frente de Salvación Nacional acusa a los Hermanos Musulmanes de hacerse las victimas
El Secretario General del Frente de Salvación y Presidente del Partido Egipcios Libres Dr. Ahmad Saeed expresó sus molestias por los datos incorrectos publicados sobre las cifras de los muertos en Rabia el-Adawia y Al-Nahda que no quieren sino mostrar al mundo que lo que está pasando en Egipto es un crimen contra la humanidad y los derechos humanos.
“Los Medios de Información deben transmitir la realidad al exterior y aclarar que lo que está pasando es un desalojo de acampadas armadas que incitan al odio y a la violencia” dijo ayer Saeed en una conversación telefónica con el canal egipcio CBC.
El líder político subrayó que lo que está pasando hoy es un resultado normal de la autorización que el pueblo concedió al gobierno actual el 26 de julio pasado para luchar contra los terroristas, reiterando que las Fuerzas de Seguridad han emitido muchas advertencias durante los 18 días pasados para una salida segura de los manifestantes pacíficos.
Reacciones de políticos tras el desalojo
Varios representantes de partidos y fuerzas políticas confirmaron que los Hermanos Musulmanes están empujando a sus jóvenes para enfrentarse directamente con el Estado a pesar de la intransigencia clara de sus líderes que insisten en la vuelta del presidente depuesto.
El Presidente del Partido Demócrata Egipcio Mohamed Abul Ghar afirmó que se habían llevado a cabo muchas negociaciones con los Hermanos Musulmanes en los días pasados y que el Gobierno tomó la iniciativa muchas veces pidiendo también los buenos oficios de algunos extranjeros que visitaron Egipto días atrás, pero todos los intentos fracasaron por la intransigencia del movimiento Hermanos Musulmanes.
Asimismo el líder del Partido Al-Wafd, Foad Abu Hamila consideró el desmantelamiento de las acampadas una decisión correcta asegurando que el pueblo apoya completamente al Estado para acabar con el caos y los disturbios provocados por los Hermanos Musulmanes.
Abu Hemila exigió a las Fuerzas de Seguridad a llevar a los líderes de los Hermanos Musulmanes a la Justicia por haber incitado a la violencia y el terrorismo reiterando que el desmantelamiento de las acampadas ha sido en el momento perfecto.
“Egipto Fuerte” responsabiliza a las autoridades del “crimen”
El portavoz del Partido Egipto Fuerte Ahmed Emam condenó el uso de fuerza aplicado en el desmantelamiento de las acampadas de Rabia y Al-Nahda.Emam calificó el desmantelamiento de las acampadas de “crimen” y dijo que “la violencia y la sangre no provocarán sino más violencia y sangre y lo que está pasando ahora es un crimen y la autoridad es el responsable”.
Tamarud llama a proteger a los habitantes
Por otro lado el movimiento opositor “Tamarud” (Rebeldía) llamó a formar comités populares para impedir a los seguidores del presidente destituido de manifestarse en otras ciudades de El Cairo y para proteger a los ciudadanos que viven en las zonas de tensión.