El grupo insurgente Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes, ha anunciado este lunes que un primer grupo de combatientes se ha infiltrado en Siria y ha establecido un centro de control para lanzar operaciones contra las fuerzas de seguridad en respaldo a los grupos opositores armados.

El alto cargo de la formación Abdul Rashid Abbasi ha confirmado asimismo que "otro grupo de entre 120 y 150 combatientes está de camino al país a través de varias rutas y llegará a las ciudades sirias durante esta semana".

"Podríamos enviar más voluntarios, pero aún no puedo dar un número exacto. Entregaremos todo el apoyo que sea necesario a nuestros hermanos sirios", ha manifestado, según ha informado el diario paquistaní “Dawn”.


Asimismo, otras fuentes del grupo han asegurado que el establecimiento del centro de operaciones en Siria se ha llevado a cabo a petición del comandante de operaciones de la organización terrorista Al-Qaeda en el país, Abu Omar al Baghdadi.

Este anuncio se ha producido apenas dos días después de que el grupo armado Lashkar e Taliban (LeT), integrado dentro del paraguas del TTP, indicara que ha enviado a cientos de combatientes a Siria para sumarse a la rebelión contra el presidente Bashar al Assad.

Los propios comandantes del LeT en Pakistán anunciaron que han decidido apoyar la causa y que hay ya cientos de milicianos que han sido enviados para sumarse a sus "amigos muyahidines", en referencia a los grupos radicales integrados en la lucha contra Al-Assad.

En concreto, una de las milicias más poderosas de la sublevación siria es el Frente al-Nusra, que juró su fidelidad a Al-Qaeda.

El Frente Al-Nusra es una fuerza menor, pero más efectiva, que las milicias del Ejército Libre Sirio respaldado por los países del golfo Pérsico y Estados Unidos, y tiene el control efectivo de la mayoría de los territorios rebeldes del norte del país.