La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) sostuvo una reunión de emergencia de presidentes el jueves pasado en la ciudad boliviana de Cochabamba, para abordar el incidente que sufrió el presidente Evo Morales en su traslado aéreo desde Rusia, dijo la secretaría del bloque regional.

El avión que trasladaba a Morales desde Rusia a La Paz se vio forzado a aterrizar el martes en Viena después de sufrir restricciones de vuelo y aterrizaje en Francia y Portugal.

Las restricciones se aplicaron por supuestas versiones de que en la aeronave estaría como pasajero el ex contratista de la agencia de seguridad estadounidense Edward Snowden, buscado por Washington por revelar detalles sobre programas secretos de vigilancia del gobierno de los Estados Unidos.


El presidente boliviano, Evo Morales relató cómo fue su viaje de regreso desde Rusia. “Decidimos aterrizar en Viena de emergencia y allí supimos que si queríamos pasar por España debían revisar el avión”.

Morales no escatimó palabras para agradecer tanto al presidente austriaco como a los presentes por las llamadas en solidaridad recibidas  a su llegada, sin dejar de hacer referencia  al ex agente de la CIA, subrayó:  “No conozco a ese señor Snowden”. Y agregó: “Yo no soy ningún delincuente para que me controlen el avión. Tuvimos que esperar hasta las 10:00 de la mañana del 3 de julio, realmente Lamento mucho que hayamos sido detenidos por 13 horas en el aeropuerto de Viena”.

“Mi pecado es ser indígena y antiimperialista”, comentó.

Por su parte, la presidente de la Argentina, Cristina Kirchner, sostuvo: “Me imagino como presidente en una situación similar y afirmó que  “Se puede poner en peligro la seguridad de una vida humana”, y también agregó que “La primera situación es una situación de carácter humanitaria grave. La segunda es una situación de carácter legal grave. Además, Se violó el derecho internacional”, para finalmente solicitar las respectivas explicaciones para haber tomado esta medida hacia el presidente sudamericano.

En tanto, el mandatario uruguayo, José Mujica, habló de “terrorismo político” y dijo: “Metieron la pata. Creo que se comieron un tornillo, nos sentimos agredidos todos en América Latina”, concluyó.


El presidente de Ecuador, Rafael Correa, también tuvo la palabra y comenzó su discurso disculpando la ausencia presidente brasilera, Dilma Rousseff, quien a pesar de haber querido estar presente le fue imposible debido a la situación interna que aqueja a Brasil.

Luego, calificó la acción como un “tremendo agravio” y afirmó: “El presidente tiene derecho a transportar a quien sea. Esperamos respuestas”.

Finalmente el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, también se refirió a la situación reivindicando  lo que hizo Snowden y dijo: “Fue muy sorprendente cuando nos informaron lo de Evo Morales” y cerró la palabra confirmando el próximo encuentro de presidentes de la zona el 12 próximo de julio en Montevideo, para la reunión del Mercosur.

Luego de los discursos de los presidentes se leyó el siguiente comunicado:

Declaración de Cochabamba:

Ante la situación a la que fuera sometido el presidente de Bolivia por parte de los gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España, denunciamos ante la comunicad internacional la violación de los tratados internacionales que rigen la convivencia pacífica, solidaridad y cooperación entre nuestros estados.

El atropello y las prácticas neocoloniales que subsisten en nuestro planeta, la falta de transparencia en las decisiones políticas, el agravio sufrido por Evo Morales, que ofende no sólo al pueblo boliviano, sino también las de todas las naciones.

El proceso de construcción de la patria grande debe consolidarse.

Las jefas y jefes de Estado reunidos en Cochabamba:
1)      Declaramos que la inaceptable restricción al presidente Evo Morales constituye una violación de derechos no sólo al pueblo boliviano, sino a toda América Latina.
2)      Rechazamos las actuaciones violatorias de normas del derecho internacional.
3)      Exigimos a los gobiernos que expliquen las razones de impedir el sobrevuelo del avión.
4)      Exigimos a los gobiernos que presenten las disculpas públicas correspondientes.
5)      Respaldamos la denuncia presentada por Bolivia ante la ONU por la grave violación a los derechos internaciones.
6)      Exhortamos a la totalidad de los jefes y jefas de Estado a acompañarnos.
Cochabamba, 4 de julio de 2013.

Antes de reunirse con sus pares, Morales participó junto con Maduro y Correa de un acto de desagravio con organizaciones sociales. En ese acto, aseguró que "no le temblará el pulso si debe cerrar la embajada de los Estados Unidos". Además, afirmó que no permitió que en Austria registraran el avión presidencial.

“En nombre del Comandante Hugo Chávez, vinimos a expresarle nuestro apoyo al presidente Morales. Quien se mete con Bolivia se mete con Venezuela (…) No es hora para la mezquindad frente a la agresión de un líder latinoamericano, se jugó con su vida, ¿qué hubiera pasado si esta agresión le hubiera costado la vida a Morales”, aseguró el mandatario Nicolás Maduro no bien pisó suelo boliviano.

Correa lanzó una implícita crítica a los ausentes, al tocar suelo boliviano: "Si lo ocurrido no justifica una reunión de jefes de Estado de nuestra América, nuestra Sudamérica ¿qué lo justifica?.

Cuando el acto estaba ya terminado, llegó la argentina Cristina Kirchner para denunciar que Europa “tuvo más de tres horas de rehén” al mandatario boliviano.  "Que pidan perdón, alguna vez en la vida, que pidan perdón por lo que han hecho", afirmó.

Kirchner consideró que "resulta curioso cuanto menos que quienes muchas veces reclaman seguridad jurídica, y quienes nos hablan del respeto al derecho internacional, con el cual todos estamos de acuerdo, hayan cometido esta inédita violación a las mal elementales normas vigentes del derecho internacional".