Internacional
“Viernes de furia” en Egipto enciende la mecha de división
30 personas murieron y más de un millar resultaron heridas durante las protestas
Al menos 30 personas murieron el viernes y otras 1.076 resultaron heridas en Egipto por la violencia desatada después de que los seguidores del depuesto presidente Mohamed Mursi protestaran por su derrocamiento.
A primeras horas de la noche, miles de partidarios y detractores de Mursi se reunieron en distintas partes de El Cairo. Soldados e integrantes de las fuerzas especiales intentaron mantener a los grupos de las dos facciones separados. Los choques se registraron después de una jornada de manifestaciones en lo que los Hermanos Musulmanes denominaron "Viernes de Furia" para protestar contra el derrocamiento de Mursi que fue depuesto el miércoles en una medida que los “Hermanos Musulmanes” calificaron como un golpe de Estado.
En El Cairo, cuatro personas murieron a tiros fuera del cuartel de la Guardia Republicana donde se cree que se encuentra detenido el depuesto presidente Mohamed Mursi. Los militares negaron ser responsables. Un portavoz dijo que las tropas no abrieron fuego sobre los manifestantes y que los soldados sólo usaron balas de salva y gases lacrimógenos.
Poco después, decenas de miles de entusiastas islamistas se congregaron cerca de una mezquita en un barrio de la capital para escuchar al líder de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, que según las fuerzas de seguridad había sido arrestado el jueves.
En un discurso desafiante, prometió "completar la revolución", y afirmó estar dispuesto a dialogar con los militares si reinstauran a Mursi.
Por su parte, el Frente del 30 de Junio, que agrupa a los grupos opositores a Mursi que instigaron las protestas en su contra hace una semana, insistió en la necesidad de seguir defendiendo en las calles la "independencia nacional" y "proteger los logros de la revolución de cualquier intento de perjudicarla desde dentro o fuera" del país, en alusión a la reacción de los Hermanos y parte de la comunidad internacional que ha condenado la acción de los militares.