Internacional
Obama pierde los nervios por la caída de Quseir
EEUU condena enérgicamente la “vuelta de Quseir a la soberanía siria”
El Gobierno de EEUU condenó este miércoles "enérgicamente" la toma del control de la estratégica localidad de Quseir, fronteriza con Líbano.
El ataque y toma de la localidad de Quseir por parte del ejército sirio, fue considerado por los analistas como una de las victorias más significativas contra los insurgentes desde el inicio del conflicto civil en Siria en marzo de 2011.
Pero, en un comunicado, la Casa Blanca dijo que ese asalto por parte del régimen del presidente sirio, Bachar al-Asad, dejó "un sinnúmero" de civiles muertos y "está causando un tremendo sufrimiento humanitario".
Según la Casa Blanca, recuperar el control de una ciudad siria por el ejército regular sirio es un Asalto, porque creen o desean que los territorios sirios deban ser dominados por grupos terroristas que cortan cabezas y mastican órganos humanos, tal como lo muestran los vídeos filmados y divulgados por los mismos terroristas que cuentan con el apoyo de la Administración del señor Obama.
Está claro que el gobierno de Obama no ha caído en la cuento que el llamado “ejército sirio libre” no está formado por civiles, tampoco son los miembros del “Frente al-Nusra” y otros grupos terroristas venidos de las cuatro esquinas del mundo para “luchar” en Siria.
Por otra parte, la Casa Blanca elogió las recientes declaraciones de líderes libanesas de mantener una postura neutral en el conflicto sirio, y reiteró que el Gobierno de EEUU apoya firmemente al pueblo sirio "en su lucha por la libertad y la dignidad", y que continuará apoyando a la oposición política y militar de corte moderado, para que puedan avanzar hacia una transición política.
Para ello, el Gobierno de Estados Unidos se ha comprometido a dar 250 millones de dólares en ayuda no letal a los rebeldes sirios, de los cuales ya se han desembolsado 127 millones, según explicó en rueda de prensa la portavoz del Departamento de Estado, Jan Psaki.
Psaki afirmó que el Gobierno de EEUU aumentará esa ayuda conforme se determinen las necesidades sobre el terreno.