Las fuerzas de seguridad iraquíes retomaron este viernes el control del distrito de “Suleiman Bek” en la provincia de Salahedín, tras la salida de los milicianos armados después de llegar a un acuerdo entre ambos.


“Las fuerzas de seguridad iraquíes empezaron a entrar en el distrito de Suleiman Bek, (a 150 Km. al norte de Bagdad) tras la salida de los milicianos armados esta madrugada”, dijo el alcalde Shalal Abdul Baban a la agencia France Press.

“Los milicianos que capturaron hace dos días esta estratégica zona la abandonaron después de llegar a un acuerdo gracias a los esfuerzos del gobernador de la provincia, Ahmed Abdalá Abed, y los jeques tribales de la zona, que lograron “apagar la sedición”, añadió.

Efectivos del ejército y la policía local entraron ya esta mañana en Suleiman Bek e inspeccionaron las casas de la localidad del mismo nombre acompañados de responsables de los clanes.


El acuerdo estipula la retirada de los milicianos de manera pacífica a cambio de que las autoridades no tomen represalias contra ellos, según la fuente.

Suleiman Bek cayó en manos de grupos armados hace dos días, tras duros enfrentamientos con las fuerzas gubernamentales en los que murieron al menos 16 combatientes de ambos bandos y decenas resultaron heridos.

Los combates estallaron el pasado martes en respuesta al asalto de las fuerzas iraquíes contra una plaza en la zona de Al Hueiya, escenario de manifestaciones y protestas, que causó la muerte a 26 personas y heridas a 155.

Ayer, Al Maliki advirtió de que todos perderán si prende la mecha de la “sedición” en Iraq y subrayó que las autoridades no tolerarán ninguna agresión contra el ejército y la policía.