El secuestro de dos obispos ortodoxos en Siria por un grupo terrorista ha indignado a la opinión pública en todo Oriente Medio. Hezbolá se ha sumado a los que condenaron el secuestro y lo ha tachado de una barbaridad.

En un comunicado hecho público el martes, Hezbolá insta a la Comunidad Internacional y las organizaciones de Derechos Humanos tomar partido en el asunto y detener los crímenes de los grupos armados en Siria.


“Los grupos terroristas armados en Siria no dejan de demostrar una tras otra su barbaridad, tanto en las profanaciones de los símbolos sagrados como en la destrucción de los templos, el secuestro de peregrinos y el asesinato de civiles inocentes. El secuestro de los dos obispos, Bulos Yazagui e Yohana Ibrahim, y asesinar su conductor, es otra prueba de la barbaridad de estos grupos”, reza el comunicado.

“Hezbolá condena ese crimen y reclama tomar posturas tajantes contra estos grupos, ya que tomar ese asunto a la ligera puede animar a estos grupos a cometer más crímenes. También reclama de la Comunidad Internacional y las organizaciones de Derechos Humanos asumir su papel de detener esos crímenes”, según el texto.

Los terroristas capturaron el lunes a los obispos Bulos Yazagui e Yohana Ibrahim, de las iglesias sirio y greco ortodoxas, respectivamente, en la región de Bab al-Hawa, en la provincia noroccidental de Idlib, donde buscaban poner en libertad a dos sacerdotes que se encontraban en manos de los grupos armados desde hace cuatro meses.


El coche de los obispos fue interceptado y forzados a entrar en otro coche que partió con rumbo desconocido, el conductor que los acompañaba, otro religioso, resultó muerto por disparos de los secuestradores.