El ministro de Sanidad de Jordania, Mujalli Mhailan, ha advertido de que el creciente número de refugiados sirios podría llevar al país a una crisis sanitaria y ha solicitado un paquete de ayuda de 250 millones de dinares jordanos (unos 270 millones de euros) para continuar entregando ayuda médica a los refugiados.


Mhailan ha destacado que el flujo de refugiados está poniendo una carga excesiva sobre el sector sanitario y ha apuntado que su ministerio dedica el 25 por ciento de su presupuesto a ampliar la atención primaria en los campamentos de refugiados, según ha informado la agencia estatal jordana de noticias, Petra.

En este sentido, ha manifestado que, en caso de que Amán no reciba la asistencia económica necesaria, el ministerio se verá forzado a recortar los servicios sanitarios que ofrece a los refugiados.

Asimismo, ha cifrado en 65 millones de dinares jordanos (unos 70 millones de euros) el coste de la asistencia sanitaria a los refugiados sirios en 2012 y ha resaltado que, con el aumento del flujo de entrada se espera que esta cifra se triplique este año.


El lunes, el Gobierno jordano subrayó que su decisión de mantener abierta la frontera con Siria para permitir la entrada de refugiados sigue en pie, a pesar de que el flujo de entrada ha alcanzado las 2.000 personas al día.