Al menos dos ciudadanos libaneses han resultado heridos este viernes a consecuencia de disparos efectuados por tropas sirias desde el otro lado de la frontera en el marco de los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad sirios y grupos opositores armados infiltrados a través de la frontera libanesa.

Varios "proyectiles" disparados desde Siria han impactado en varias localidades de la región fronteriza de Aqqar. Desde el inicio de los enfrentamientos armados en Siria se han producido varios incidentes transfronterizos, debido a que los grupos armados que operan contra el ejército regular sirio entran y salen del país a través de las fronteras con Líbano, Turquía y Jordania.

Decenas de libaneses han muerto o han resultado heridos en las localidades cercanas a la frontera a causa del impacto de cohetes o balas perdidas desde el inicio del conflicto.

Los incidentes se han registrado apenas un día después de que el Gobierno sirio advirtiera de que "pese a que está mostrando contención para no atacar los refugios de las bandas terroristas en el interior de Líbano para evitar que crucen la frontera, esta postura no se mantendrá de forma ilimitada".


Fuentes militares y de seguridad en Líbano han reconocido que la infiltración de hombres armados hacia Siria es una realidad. "El tráfico está centrado en las montañas de Arsal y las zonas de Al Qaa y Wadi Jaled, pero los hombres armados no tienen posiciones permanentes", han dicho estas fuentes, según ha recogido el diario libanés “An Nahar”.

El ministro de Exteriores de Líbano, Adnan Mansur, ha advertido de que quieren convertir Líbano en un nuevo “Tora Bora”, señalando que la misión de las fuerzas militares y de seguridad es controlar las fronteras con “firmeza” para asegurar la seguridad y la estabilidad dentro de Líbano.

A su vez, el embajador sirio en Beirut, Ali Abdulkarim Ali, declaró que “el Estado libanés debe cumplir con sus obligaciones en la frontera con Siria”, y agregó “no tenemos interés en aumentar la tensión con Líbano, pero al mismo tiempo debemos asegurar la seguridad y la soberanía de Siria. Nos están atacando y vamos a aceptarlo más”.

Por su parte, el presidente de Líbano, Michel Suleiman, ha recalcado que las autoridades libanesas "están al frente de los intentos para evitar la infiltración de hombres armados" y ha insistido en la política de disociación del conflicto adoptada por Beirut.