Internacional
UE debate levantar embargo de armas a grupos opositores sirios
Austria, Alemania y Suecia, entre otros, han rechazado esa propuesta
La Unión Europea (UE) tiene planeado analizar la próxima semana el posible levantamiento del embargo de armas a los grupos opositores sirios que luchan contra el Gobierno del presidente Bashar Al-Assad; una petición formulada por Francia y el Reino Unido.
“La cuestión del embargo de armas fue puesta sobre la mesa por algunos Estados miembros.
Hemos acordado pedir a nuestros ministros de Exteriores que evalúen la situación como una cuestión prioritaria ya la próxima semana en su Consejo informal que celebrarán en Dublín y que desarrollen posiciones comunes”, ha declarado el presidente del Consejo Europeo, Van Rompuy, en Bruselas, Bélgica.
De acuerdo con el titular europeo, esa cuestión “será el primer punto del orden del día” del consejo informal de ministros de Asuntos Exteriores a celebrarse los días 22 y 23 de marzo en la capital irlandesa, Dublín.
Francia y el Reino Unido instan a otros miembros del bloque europeo a levantar el embargo de armas a las pandillas armadas sirias, dado que la renovación de sanciones contra el país árabe, por otros tres meses, impide el suministro de armas tanto al Gobierno como a las bandas armadas.
El presidente francés, François Hollande, explicó que “la solución política ha fracasado por ahora”, así que debemos convencer a los demás de la necesidad de dar un giro a la postura del bloque respecto a la crisis siria.
No obstante, Austria, Alemania y Suecia, entre otros, han rechazado esa propuesta; el canciller austriaco, Werner Faymann, ha señalado que su Gobierno está en contra de la entrega de armas a cualquier parte en Siria, ya que esa vía no es “una solución”.
París y Londres, por su parte, han advertido de que seguirán adelante por su cuenta en el caso de que no hubiese un acuerdo unánime entre los Veintisiete.
Los países intervencionistas están preocupados por la carencia de armas entre los grupos armados sirios y su consiguiente incapacidad de luchar contra el Gobierno de Damasco, es decir, el objetivo por el cual han brindado su apoyo financiero, logístico y armamentístico, desde hace más de dos años, e incluso el envío de ciudadanos extranjeros para integrar filas de la oposición.
| La Unión Europea (UE) tiene planeado analizar la próxima semana el posible levantamiento del embargo de armas a los grupos opositores sirios que luchan contra el Gobierno del presidente Bashar Al-Assad; una petición formulada por Francia y el Reino Unido.
“La cuestión del embargo de armas fue puesta sobre la mesa por algunos Estados miembros.
Hemos acordado pedir a nuestros ministros de Exteriores que evalúen la situación como una cuestión prioritaria ya la próxima semana en su Consejo informal que celebrarán en Dublín y que desarrollen posiciones comunes”, ha declarado el presidente del Consejo Europeo, Van Rompuy, en Bruselas, Bélgica.
De acuerdo con el titular europeo, esa cuestión “será el primer punto del orden del día” del consejo informal de ministros de Asuntos Exteriores a celebrarse los días 22 y 23 de marzo en la capital irlandesa, Dublín.
Francia y el Reino Unido instan a otros miembros del bloque europeo a levantar el embargo de armas a las pandillas armadas sirias, dado que la renovación de sanciones contra el país árabe, por otros tres meses, impide el suministro de armas tanto al Gobierno como a las bandas armadas.
El presidente francés, François Hollande, explicó que “la solución política ha fracasado por ahora”, así que debemos convencer a los demás de la necesidad de dar un giro a la postura del bloque respecto a la crisis siria.
No obstante, Austria, Alemania y Suecia, entre otros, han rechazado esa propuesta; el canciller austriaco, Werner Faymann, ha señalado que su Gobierno está en contra de la entrega de armas a cualquier parte en Siria, ya que esa vía no es “una solución”.
París y Londres, por su parte, han advertido de que seguirán adelante por su cuenta en el caso de que no hubiese un acuerdo unánime entre los Veintisiete.
Los países intervencionistas están preocupados por la carencia de armas entre los grupos armados sirios y su consiguiente incapacidad de luchar contra el Gobierno de Damasco, es decir, el objetivo por el cual han brindado su apoyo financiero, logístico y armamentístico, desde hace más de dos años, e incluso el envío de ciudadanos extranjeros para integrar filas de la oposición.