El primer ministro británico, David Cameron, ha sugerido este martes que Reino Unido podría llegar a incumplir el embargo de armas impuesto a Siria, con el objetivo de ayudar a los rebeldes que intentan derrocar al régimen.


El embargo de armas forma parte de las sanciones impuestas por la Unión Europea contra el régimen sirio durante los próximos tres meses, cuya ampliación fue aprobada con el acuerdo de los 27 países del bloque comunitario el pasado 1 de marzo.

Reino Unido presionó en el seno de la UE y logró un acuerdo que enmendó el embargo, para poder suministrar equipos no letales como chalecos antibalas y vehículos blindados a los rebeldes, pero ya entonces advirtió de que en el futuro podría actuar por su propia cuenta.

"Confío en que podamos persuadir a nuestros socios europeos cuando sean necesarios más cambios", ha asegurado Cameron, en su comparecencia ante un comité parlamentario que le ha preguntado si Reino Unido podría llegar a vetar el embargo de armas. "Si no podemos, no se puede descartar que podamos hacer las cosas por nuestro lado. Es posible", ha añadido.

Ayer, lunes, el Gobierno francés emplazó a la Unión Europea a estudiar el levantamiento del embargo de armas, una decisión que no comparte Alemania, que cree que un paso así podría aumentar el conflicto a todo Oriente Próximo.

El ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, aseguró que el final del embargo podría ayudar a equilibrar un conflicto en el que ya han muerto unas 70.000 personas. Su homólogo alemán, Guido Westerwelle, alertó de que retirar el embargo podría dar lugar a una proliferación de armas en la región y a una ampliación del conflicto.