El Gobierno español ha condenado hoy "en los términos más enérgicos" el "bárbaro" atentado terrorista perpetrado ayer en la ciudad paquistaní de Karachi (sur del país), y que ha costado la vida a 48 de personas y ha provocado más de un centenar de heridos.

En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, el Ejecutivo de Mariano Rajoy advierte de que este ataque no tenía otro objetivo que el de "socavar la coexistencia pacífica y el entendimiento entre las diferentes comunidades religiosas presentes en Pakistán".

"España, que ha seguido con mucha atención los esfuerzos desplegados por las autoridades de Pakistán para promover el diálogo interreligioso, anima al Gobierno de dicho país a seguir impulsando todas aquellas iniciativas que puedan redundar en una disminución de tan injustificables actos de violencia", continúa la nota.

El Gobierno español reconoce haber conocido "con dolor y profunda consternación" las noticias relativas a este nuevo atentado y traslada su "sincero sentimiento de pesar y su deseo de que los heridos puedan recuperarse cuanto antes".