Rusia es consciente de que el curso de la situación en siria ha llegado a un punto crucial, en un cruce de caminos donde aumentan las posibilidades de poner fin al conflicto a través del diálogo, en cambio, “la continuación del baño de sangre”, según la expresión del ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, podría suponer el "desmoronamiento" del Estado.

Durante el encuentro con su homólogo sirio, Walid Mualem, Lavrov declaró que que los que desean seguir el camino de “resolver la crisis siria” está en aumento, y subrayó que las autoridades sirias no deberían prestar atención a las provocaciones de los “contrarios a un acuerdo pacífico”, según expresó.


Lavrov, durante una rueda de prensa conjunta en Moscú, dijo que “los que apoyan la línea realista (solución pacífica) están en aumento, esto lo saben los que quieren que la guerra continúe hasta el final, por eso tratan de abortar cualquier gesto positivo en las filas de la oposición e impiden el inicio de diálogo”.

“En estas condiciones, es necesario que los líderes sirios insistan en sus peticiones a dialogar y que no se dejen llevar por las provocaciones”, agregó.

Por su parte, Mualem ha afirmado la disposición del régimen sirio a dialogar con todas partes, incluidos los grupos armados, puesto que las reformas no pueden ser realizadas a través del derramamiento de sangre, sino únicamente a través del diálogo.

“Estamos dispuestos a dialogar con todos los que quieran dialogar, incluidos los grupos armados", declaró Mualem.

El canciller sirio añadió que “Lo que está sucediendo en Siria es una guerra contra el terrorismo”, señalando que un importante brazo de la organización Al-Qaeda está combatiendo en Siria.

La reacción de la oposición siria no se ha hecho esperar. Un portavoz del denominado “ejército libre” (ELS) ha respondido de manera tajante que no hablarán "hasta que Bashar Asad dimita".

Mualem agradeció a los líderes rusos su postura en relación al conflicto sirio, y dijo que “eta postura hace más cerca y posible una solución pacífica a la crisis”.

Se espera que el ministro de Exteriores sirio tenga un encuentro en Teherán con su homólogo iraní, Ali Akbar Salehi, y otros altos funcionarios iraníes, donde hablarán sobre el asunto sirio y otros asuntos regionales e internacionales.