Un militar turco ha matado con un fusil de asalto a tres compañeros de armas en el interior de una base militar en el sureste de Turquía, según han informado fuentes de los servicios de seguridad turcos.

Por el momento, se desconoce la identidad del autor de los disparos, que ha resultado herido en el incidente, y el motivo que le llevó a disparar con un fusil de asalto contra sus tres colegas. El incidente se ha registrado en una base militar situada en el distrito Pervari, en la provincia de Siirt, cerca de la frontera con Iraq.

En Turquía ha habido incidentes similares que tanto los medios como las autoridades han atribuido a la presión de la vida militar en un momento de especial violencia por los enfrentamientos entre el Ejército y los milicianos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

Los combates entre militares y milicianos del PKK aumentaron el pasado verano hasta niveles nunca antes alcanzados desde los años 90 y provocaron un elevado número de bajas en ambos bandos y decenas de víctimas civiles.

Turquía mantiene el servicio militar obligatorio y cuenta con un contingente de 500.000 militares en sus Fuerzas Armadas, lo que le convierte en el segundo país de la OTAN con más uniformados. La mayoría de los reclutas son llamados a filas a los 18 años y tienen que cumplir quince meses de servicio.