La entidad sionista está decepcionada por el rechazo de la Unión Europea a la petición israelí de incluir a Hezbolá en la lista negra de organizaciones terroristas, ha revelado el periódico israelí Maariv.

“Israel ha hecho grandes esfuerzos en las últimas semanas para incluir a Hezbolá en la lista negra de las organizaciones terroristas, de la Unión Europea. Israel tiene prisa para aislar al movimiento Hezbolá y debilitarlo en Líbano. Estados Unidos, Reino Unido y Canadá respaldan ese proceso, pero Francia se opone. La Unión Europeo no puede tomar una decisión así sin el consenso de los 27 Estados de la Unión”, informa Maariv.


Según el diario, los franceses temen que tal medida tenga repercusiones en la frágil estabilidad en Líbano, mientras el Comité de la Unión en Bruselas se opone a esta medida por temor a que Hezbolá presente una querella ante el Tribunal Europeo de Luxemburgo y reclamar la revocación de la decisión, ya que habría sido tomada sin evidencias legalmente admisibles, de otro lado, el retraso en publicar el informe búlgaro considerado como “cortina de humo” que implica a Hezbolá con la explosión en Burgas, el 18 de julio, donde murieron cinco turistas israelíes y el chofer búlgaro, podría servir de pretexto para retrasar la decisión.

Maariv ha revelado que “Tel Aviv” está elaborando documentos para ayudar a Europa a tomar dicha decisión, y señala que los documentos archivan “actos ocurridos durante años, en las cuales Hezbolá está implicado, para demostrar que se trata de una organización terrorista”.


Entre los documentos: El secuestro de Elhanan Elhanan Tannenbaum en el año 2000 (coronel en la reserva que fue capturado por Hezbolá y liberado posteriormente en el marco de un acuerdo de intercambio de prisioneros en 2004), y las pruebas presentadas por el Tribunal Internacional que relacionaba Hezbolá con el asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri en 2005. Otro documento trata de las ayudas prestadas por Hezbolá a las fuerzas leales al presidente sirio Al-Assad, además de actividades de Hezbolá en el contrabando de drogas hacia Europa y el blanqueo de dinero en los bancos libaneses. Siempre según Maariv.

Maariv informó que "Israel" cree que el “crecimiento” de Hezbolá en Líbano, dentro del ejército, las fuerzas de seguridad interior y la economía, va a ir a costa de los elementos moderados en Líbano. Y que los franceses piensan que el anuncio de que Hezbolá es una organización terrorista conducirá a la inestabilidad política en Líbano y que, según el punto de vista francés, Hezbolá es un movimiento político importante con quien se debe llevar a cabo un diálogo, ya que un tercio de los miembros del Gobierno de Líbano son de Hezbolá.


Maariv señaló que "Israel" empezó con su empeño en introducir a Hezbolá en la lista de terroristas de la Unión Europea desde el año 2005, entonces Francia bloqueó la iniciativa. "Israel" ha aumentado la presión después de la explosión, que ocurrió en Burgas en Bulgaria. Incluso el dimitido Ministro de Relaciones Exteriores, Avigdor Lieberman, planteó la cuestión en una reunión pocos días después del atentado, con el Secretario de Estado de la Unión, Catherine Ashton.

El informe final de la autoridad investigadora búlgara todavía está lejos, debido a que no se encontraron pruebas concluyentes admisibles en los tribunales para relacionar a Hezbolá.