Internacional
79 querellantes exigen 3,3 millones de euros
Víctimas afganas de un ataque alemán demandan al gobierno de Merkel
Familiares de las víctimas de un bombardeo aéreo ordenado por el Ejército alemán en Afganistán en 2009 acudieron a la Justicia para pedir una millonaria indemnización del gobierno en Berlín, según su abogado.
El incidente se produjo el 4 de septiembre de 2009 en la provincia de Kunduz, norte de Afganistán, cuando el comandante alemán en la zona pidió a fuerzas de la OTAN bombardear dos camiones cisterna supuestamente secuestrados por talibán.
El ataque dejó 91 muertos según el gobierno alemán y 142 según fuentes afganas, incluyendo decenas de civiles.
La corte del distrito de Bonn recibió el jueves diez demandas conjuntas contra el gobierno de Ángela Merkel, en las que 79 querellantes exigen un total de 3,3 millones de euros, explicó el letrado Karim Popal.
"Muchos huérfanos y viudas perdieron al cabeza de familia debido a este brutal crimen de guerra. Muchas madres perdieron a sus hijos", señaló en un comunicado. "Y casi todos los supervivientes quedaron traumatizados y no están recibiendo tratamiento psicológico".
Un portavoz del Ministerio de Defensa en Berlín apuntó que el gobierno alemán ya pagó 90 indemnizaciones de 3.900 euros a las familias de las víctimas, lo que suma alrededor de 350.000 euros.
La acción obligó a renunciar al entonces ministro de Defensa alemán Franz-Josef Jung y desató un escándalo en el país semanas antes de las elecciones generales que ganó Merkel.
Popal ya presentó en 2011 una demanda conjunta de cuatro familiares que aún está pendiente de resolución, según explicó. En la nueva demanda, los 79 querellantes exigen indemnizaciones que van de 20.000 a 75.000 euros.
| Familiares de las víctimas de un bombardeo aéreo ordenado por el Ejército alemán en Afganistán en 2009 acudieron a la Justicia para pedir una millonaria indemnización del gobierno en Berlín, según su abogado.
El incidente se produjo el 4 de septiembre de 2009 en la provincia de Kunduz, norte de Afganistán, cuando el comandante alemán en la zona pidió a fuerzas de la OTAN bombardear dos camiones cisterna supuestamente secuestrados por talibán.
El ataque dejó 91 muertos según el gobierno alemán y 142 según fuentes afganas, incluyendo decenas de civiles.
La corte del distrito de Bonn recibió el jueves diez demandas conjuntas contra el gobierno de Ángela Merkel, en las que 79 querellantes exigen un total de 3,3 millones de euros, explicó el letrado Karim Popal.
"Muchos huérfanos y viudas perdieron al cabeza de familia debido a este brutal crimen de guerra. Muchas madres perdieron a sus hijos", señaló en un comunicado. "Y casi todos los supervivientes quedaron traumatizados y no están recibiendo tratamiento psicológico".
Un portavoz del Ministerio de Defensa en Berlín apuntó que el gobierno alemán ya pagó 90 indemnizaciones de 3.900 euros a las familias de las víctimas, lo que suma alrededor de 350.000 euros.
La acción obligó a renunciar al entonces ministro de Defensa alemán Franz-Josef Jung y desató un escándalo en el país semanas antes de las elecciones generales que ganó Merkel.
Popal ya presentó en 2011 una demanda conjunta de cuatro familiares que aún está pendiente de resolución, según explicó. En la nueva demanda, los 79 querellantes exigen indemnizaciones que van de 20.000 a 75.000 euros.